Diccionario de seguros

Fehaciente

Fehaciente es un adjetivo calificativo que otorga la certeza o veracidad de una cosa. Un hecho fehaciente es algo irrefutable, fidedigno e inequívoco.

Esta palabra goza de mucha importancia en el ámbito jurídico, ya que constantemente se usan notificaciones fehacientes con valor probatorio documental. Una notificación fehaciente garantiza que la notificación llegue a su destino, evitando de esta manera futuros problemas, ya que queda registrada la entrega con fecha, firma y datos de quien la recibió. Comunicaciones no fehacientes podrían ser el fax, el correo electrónico, el correo certificado o el SMS. No serían fehacientes porque no reflejan constancia en la entrega ni puede demostrarse que el remitente lo haya recibido de manera fidedigna.

Otro ejemplo dentro del ámbito jurídico de esta palabra se encuentra en las pruebas fehacientes, que son aquellas capaces de demostrar la existencia de un hecho. Este tipo de pruebas son una fuente irrefutable ya que demuestran de manera inequívoca su existencia, aunque en un juicio no tengan por qué ser pruebas concluyentes, pero sí encaminan el proceso hacia su veredicto. 

La palabra fehaciente significa irrefutable y su uso es muy útil en muchos campos diferentes

Para entender mejor este concepto: supongamos que una persona es acusada de asesinar a otra y el detenido dice no conocer a la supuesta víctima. Pero resulta que se han encontrado restos de ADN de la piel del detenido debajo de las uñas de la víctima. Esta prueba o descubrimiento supondría una prueba irrefutable, ya que determina que ambos tuvieron contacto en algún momento, y además indica una agresión ya que la víctima tenía ADN en las uñas de haber hecho un arañazo al acusado tratando de defenderse.

¿En qué otros casos se puede utilizar esta palabra?

Esta palabra se podría extender a muchos campos, no únicamente al del ámbito judicial. Otro sector que trata con frecuencia esta palabra es el de los seguros, ya que dejar constancia fehaciente de ciertas cosas será necesario al tratar con las compañías aseguradoras.

La constancia fehaciente referida a los seguros se suele utilizar al realizar un cambio de compañía. Consiste en el envío de la anulación de la póliza a la compañía a través de una dirección de correo electrónico o un fax facilitado por ellos. Tras realizar la notificación, el asegurado podrá pedir un acuse de recibo como prueba ante posibles reclamaciones de la compañía en el futuro.

Si no realizamos esta notificación a la compañía de la manera adecuada, podremos vernos con dos seguros al mismo tiempo para un mismo bien. Esto ocurre de manera habitual en los seguros de coche o seguros de moto, aunque también con cierta frecuencia en los seguros de hogar. Dado que las dos compañías (la anterior y la nueva) nos consideran asegurados suyos, nos reclamarán dos primas.

Para que esto no ocurra debemos utilizar un canal fehaciente para realizar la notificación y además hacerlo dentro del plazo acordado (un mes antes del vencimiento de la póliza como fecha máxima). En caso de ser la aseguradora quien rompa el contrato de seguro, deberá comunicarlo con al menos dos meses de antelación. Las mejores vías para hacer una comunicación fehaciente con una aseguradora serían: por escrito (entregándolo en la oficina de la aseguradora y pidiendo que te sellen un duplicado con la fecha de entrega) o por burofax (ya que el destinatario lo firma, confirmando fehacientemente su recepción).