Deja tus datos y te llamaremos para resolver tus dudas y recibir consejo de un profesional.
HABLA CON UN EXPERTO
Elige el tipo de seguro y nos pondremos en contacto contigo.
Los seguros de Salud encuadrados en la modalidad de Asistencia Sanitaria se encuentran especialmente diseñados para proporcionar a los asegurados, como contrapartida al pago de una prima anual, el acceso a una extensa relación de servicios médicos dirigidos a prevenir o solucionar cualquier tipo de problema relacionado con su estado salud.
De entre las diferentes modalidades de seguros de Salud que las entidades aseguradoras distribuyen en el mercado asegurador español, los de Asistencia Sanitaria son, con mucha diferencia sobre el resto de opciones, los preferidos por los usuarios de este tipo de soluciones en España; de hecho, se trata de una modalidad que aporta al ramo de Salud alrededor del 90% de su volumen total de negocio.
Un tipo de seguros de Salud a los que también se les conoce como de cuadro médico. El motivo reside en que el asegurado ha suscrito una de estas pólizas de Asistencia Sanitaria, la entidad aseguradora, además de los documentos contractuales relacionados con su seguro, hará entrega de su cuadro médico al cliente. Sin duda, una herramienta fundamental para el asegurado, puesto que, en el cuadro médico, la entidad aseguradora recoge de forma detallada tanto la relación de profesionales médicos como la de centros asistenciales (clínicas, hospitales, centros de día…) que pone a su disposición. Una información que, además de por provincias, la compañía se la ofrece al asegurado ordenada en función de las distintas especialidades médicas. En la actualidad, las entidades aseguradoras facilitan a sus asegurados acceso online a su cuadro médico vía web y app.
Pero, además, con respecto a este tipo de seguros de Asistencia Sanitaria, también resulta conveniente apuntar que el asegurado, por norma general, cuenta con la posibilidad de contratarlo con o sin copago. Es decir, que el usuario tendrá que abonar una determinada cantidad económica (con copago) o no (sin copago) para tener acceso a los servicios asistenciales que se contemplan en la póliza de Asistencia Sanitaria que ha contratado.
Por otra parte, aunque constituyen una modalidad de seguros de Salud por si solos, en el fondo, los de Reembolso de Gastos también son seguros de Asistencia Sanitaria. La principal diferencia con respecto a los conocidos como de cuadro médico reside en que el asegurado puede elegir libremente el profesional médico o centro asistencial al que acudir para ser tratado, aunque no se encuentre recogido entre los que la entidad aseguradora pone a su disposición a través de su cuadro médico. En estos casos, el asegurado se verá obligado a costear por adelantado el coste de la atención médica recibida para, a continuación, solicitar su reembolso a la compañía aseguradora; para ello, el asegurado deberá trasladar, junto al informe médico correspondiente, la factura de los mencionados servicios.
Después de formalizar la contratación de un seguro de Asistencia Sanitaria, además del cuadro médico, tal y como se ha visto anteriormente, la entidad aseguradora debe hacer entrega a su asegurado de la póliza. De hecho, la póliza es, con respecto al contrato de seguro, el documento fundamental en el que se recogen, de forma pormenorizada, todas las cláusulas que contempla el mismo.
En concreto, la póliza consta de condiciones generales y particulares. Las primeras son las que afectan de igual forma a todas las pólizas que distribuye una compañía de igual modalidad. Mientras que en las particulares aparecen recogidos todos los detalles que particularizan el riesgo asegurado, entre los que se encuentran las garantías que incorpora la póliza de Asistencia Sanitaria, así como las restricciones o limitaciones que incluye.
Así, entre el amplio abanico de servicios médicos y asistenciales que incluyen, los seguros de Asistencia Sanitaria de cuadro médico garantizan el acceso del asegurado a la atención médica primaria, que contempla medicina general, pediatría, puericultura, enfermería, urgencias domiciliarias y ambulatorias… Del mismo modo, este tipo de soluciones aseguradoras facilitan al asegurado el acceso una extensa relación de especialidades médicas como: dermatología, ginecología, cardiología, traumatología, oncología, neumología, neurología…
Además de todas las coberturas mencionadas líneas atrás, estos seguros también garantizan al asegurado la asistencia de tipo hospitalario, incluyendo los ingresos derivados de intervenciones quirúrgicas o los que atienden a otro tipo de motivos, como pueden ser los relacionados con algunas pruebas diagnósticas. En este sentido, esta modalidad de seguros de Salud garantiza la hospitalización del asegurado en una habitación individual, en la que podrá estar acompañado por un familiar que tendrá una cama a su disposición. Asimismo, estas pólizas de Salud también contemplan el acceso a tratamientos especiales como, por ejemplo, la rehabilitación o la quimioterapia. Además, en algunas ocasiones, estas pólizas también incluyen servicios bucodentales y asistencia psicológica. A lo que hay que añadir los servicios médicos y asistenciales de urgencia que la entidad aseguradora les brinda.
Por otro lado, además de la extensa lista de coberturas citadas, las pólizas de Asistencia Sanitaria ofrecen a sus usuarios otro tipo de ventajas adicionales. Por ejemplo, permiten al asegurado elegir tanto el profesional médico como el centro sanitario al que desea acudir (con flexibilidad de horarios). Del mismo modo, garantizan una rápida atención, más aun si se tiene en cuenta las largas listas de espera que soporta la sanidad pública española para determinadas especialidades e intervenciones quirúrgicas. Pero, además, los seguros de Asistencia Sanitaria también aportan al asegurado valor añadido en forma de servicios dirigidos a cuidar de su salud aunque éste no se encuentre enfermo; es decir, se trata de soluciones aseguradoras que a su vez fomentan la prevención de todo tipo de patologías relacionadas con la salud y el bienestar del asegurado.
Por último, el asegurado siempre deberá tener en cuenta que las entidades aseguradoras contemplan, en el caso de determinadas coberturas, plazos de carencia para poder tener acceso a algunas de las garantías médicas o asistenciales que se incluyen en la póliza de Asistencia Sanitaria. Por ejemplo, entre las más conocidas, se encuentran las relacionadas con el tratamiento del embarazo y la asistencia sanitaria en el parto; en ese sentido, las compañías contemplan periodos de carencia que van desde los 8 hasta los 10 meses.
MÁS INFORMACIÓN SOBRE SEGUROS
HABLA CON UN EXPERTO
Deja tus datos y te llamaremos para resolver tus dudas y recibir consejo de un profesional.