Diccionario de seguros

Novación del contrato de seguro

Consiste en la modificación de alguno de los términos esenciales de una póliza de seguros, como por ejemplo la reducción o aumento de los objetos o bienes asegurados, la incorporación de nuevos riesgos a asegurar, la rectificación de los capitales asegurados, etc.

Para certificar su validez, estas modificaciones sobre el seguro original deberán reunirse en un documento anexo a la póliza, que se llama suplemento de póliza.

Se pueden realizar modificaciones en las pólizas de seguros antes de su vencimiento, consultándoselo a la aseguradora y realizando para ello un suplemento de póliza. 

Motivos por los que podemos modificar la póliza

  • Modificación del precio o de las coberturas del seguro: es posible que una aseguradora actualice los precios o coberturas en las pólizas de sus asegurados, debiendo comunicárselo con antelación, y si el asegurado no está conforme con este cambio, dispondrá de quince días para rechazarlo y cancelar la póliza sin ningún tipo de penalización. Si el asegurado no emite una reclamación en este plazo, la compañía entenderá la aceptación de las modificaciones por parte del asegurado.
  • Reducción del riesgo: pese a ser las aseguradoras quienes valoran el riesgo y fijan la prima (lo que pagas por el seguro), este riesgo puede verse reducido por diversos factores, pudiendo comunicarlo el asegurado a la compañía para que esta valore reducir la prima. Por ejemplo, en un seguro de vida donde el asegurado cambia una costumbre perjudicial como fumar, disminuyendo drásticamente o eliminando por completo este hábito, y reduciendo así el riesgo de padecer enfermedades coronarias o cánceres derivados del tabaquismo.
  • Contratación a distancia: en esta modalidad, los seguros realizados de manera online podrán anularse en los quince días posteriores a la contratación. Por ejemplo, en los seguros de vida, tras realizar la contratación, el asegurado dispone de treinta días para desistir de dicho contrato, quedando así anulada la póliza.
Se puede modificar alguna cobertura de la póliza por ciertos motivos, con el fin de conseguir una indemnización en caso de siniestro

Dado que, al contratar un seguro, la valoración del riesgo que hace la compañía y la prima que determina se basa en la veracidad de la información dada por el asegurado (de manera escrita o verbal), se presupone que la información es exacta y actualizada. Si en el momento de sufrir un siniestro, la compañía es capaz de verificar que la situación no es tal y como la describió el asegurado en el momento de la contratación, podrá negarse a cubrir los daños ocasionados y dar la prestación que correspondería. También podría ocurrir que la compañía decidiera indemnizar una parte proporcional de los daños, teniendo en cuenta la diferencia entre la prima contratada en la póliza y la prima que hubieran propuesto si se conociesen los riesgos reales desde un principio.

Como hemos visto, es muy importante mantener nuestras pólizas de seguros actualizadas, ya que esto nos dará la tranquilidad de estar cubiertos cuando suframos un siniestro. En la mayoría de los casos no es necesario realizar una nueva contratación de seguro, ya que realizando una novación del contrato (un suplemento de póliza), podremos actualizar las coberturas.