¿Sabes diferenciar un seguro de vida de uno de muerte?
En este artículo podrás informarte acerca de
Ante la pregunta que nos encontramos en el titular, nos atreveríamos sin duda alguna, a responder por la inmensa mayoría de vosotros: no, a priori no sabríais diferenciarlo. De hecho, no es ni tan siquiera un tema “simpático” del que hablar. Puede que a veces lo evitemos, pero enfrentarnos a él puede ayudarnos mucho en situaciones en las que ninguno queremos vernos, ni a nadie de nuestra familia, pero que tristemente forman parte del proceso de la vida. ¡Mejor resolver las cosas con acierto enfrentándose a ellas!
En este post aclaramos la pregunta que formulamos en el titular de forma sencilla evitando entrar en demasiados tecnicismos para que todo quien llegue a este artículo se vaya satisfecho de lo aprendido.
¿Qué es un Seguro de Vida? Definición
¿Alguna vez has pensado qué sería de tu familia o seres queridos si tú desapareces de este mundo? Genera cierta ansiedad, ¿verdad? Pues si tuvieras un seguro de vida, esta ansiedad desaparecería.
Ahora ya tienes más o menos claro de qué va este tipo de seguro, ¿no? Más sencillo imposible, pero profundicemos un poco más. Un seguro de vida es aquel que, a cambio de una cuota mensual fija, indemnizará económicamente al tomador en caso de invalidez por accidente o enfermedad o a sus familiares (o persona que él decida) tras su defunción. Eso sí, todo depende de las coberturas contratadas, así como de la compañía elegida, ya que esto hará que no todos los seguros de vida sean iguales. Como sucede siempre en este mundillo de los seguros, todo depende de las coberturas contratadas en cada caso.
Además, para calcular la prima de este tipo de seguros se tienen en cuenta multitud de factores como edad, estilo de vida, sexo, etc. El resultado es casi personalizado.
¿Qué es un Seguro de Muerte? Definición
Posiblemente este tipo de seguro sea más conocido como seguro de decesos o seguro de gastos finales. Este tipo de seguros tiene como fin único el de hacerse cargo de los gastos funerarios correspondientes a una muerte.
La parte contratante paga mes a mes esta póliza con el fin de evitar que sus familiares o círculo íntimo tengan que desembolsar una cantidad de dinero determinada llegado el momento de su defunción. El hecho de darlo de alta supone un trance para todo aquel que lo tramita, pero siempre queda la satisfacción de estar haciendo un favor a tus seres queridos evitándoles un proceso tedioso en un momento más que delicado para ellos.
Una vez el tomador muere, es el seguro el que se hace cargo de todo el proceso siempre contando con la opinión y decisiones finales de los familiares o del propio asegurado. Todo quiere decir todo, por no hablar de la cantidad de papeleo que este triste proceso conlleva.
Por tanto, ¿qué diferencias existen entre un seguro de vida y un seguro de muerte?
Visto lo anterior, ya tenemos claro que el seguro de decesos se encarga de los gastos funerarios y trámites en el momento de la muerte y el seguro de vida es el encargado de indemnizar a familiares (o personas elegidas por el contratante) tras su muerte o al propio tomador tras haber sufrido una enfermedad que le impida llevar una vida normal.
Otra de las principales diferencias entre ambos seguros es que el seguro de muerte es más “asequible” que el seguro de vida, ya que su fin es básicamente el de cubrir los gastos que la muerte genera.
Por último, señalamos otra diferencia fundamental y es que el seguro de decesos tiene un carácter más inmediato, es decir, el proceso de reclamación es más sencillo, ya que, en la mayoría de los casos, los gastos funerarios han de abonarse con cierta inmediatez. Este tipo de pólizas están 100% preparadas para actuar de forma inmediata.
Esperamos haber aclarado de forma sencilla ambos conceptos y que sea dentro de mucho tiempo cuando tengáis que hacer uso de este aprendizaje.