Ventajas de buscar seguros por Internet

Buscar seguros por Internet, sean del tipo que sean, se ha convertido en una actividad tan cotidiana como pedir comida a domicilio o comprar productos de primera necesidad a través de la red solicitando entrega rápida a domicilio. Es una realidad, Internet llegó hace unas décadas para cambiar nuestro estilo de vida -en la mayoría de los casos para mejor- y sobre todo y fundamentalmente, para hacer nuestro día a día más cómodo y sencillo. 

En la actualidad podemos buscar todo aquello que deseamos o necesitamos a través de Internet sin movernos de casa. Si tenemos la necesidad de buscar seguros por internet como puede ser el caso de los seguros de hogar, coche, decesos o moto, no tenemos por qué recorrer infinidad de establecimientos físicos para solicitar información y poder comparar entre la oferta de unas compañías aseguradoras y otras. Francamente, poder realizar este tipo de búsquedas desde la tranquilidad del hogar es pura comodidad y, aunque muchas personas pueden sentirse aturdidas ante la gran cantidad de información que se muestra en la red, siempre se acaba dando con una página web, como la de El Corte Inglés Seguros, en la que resolver todas las dudas. 

Además, de unos años a esta parte, las redes sociales se han convertido también en una fuente de información como si de cualquier otro buscador “al uso” se tratara. Ahora, el consumidor busca los perfiles de las marcas en redes sociales con el fin de comprobar si son respetables, cuidan su imagen o simplemente tienen un servicio de atención al cliente personalizado. No sin olvidar lo más importante, las opiniones de otros consumidores. 

El ser humano, por su propia naturaleza, presta más atención a las opiniones de otros iguales antes que a los mensajes que aparecen tanto por parte de las empresas como de los medios de comunicación, por aquello de que tienen un matiz más impersonal. Aunque estos mensajes sean verdad, siempre creeremos más aquello que nos dice una persona conocida, que el mensaje que vemos en otro tipo de formatos. En este sentido, las redes sociales y otro tipo de plataformas donde usuarios y consumidores ponen en valor sus opiniones y experiencias, se han convertido en parada obligatoria durante el proceso de decisión de compra de cualquier consumidor antes de decantarse por algo en concreto -en el caso de los seguros, por una compañía u otra o por un tipo de seguro u otro-. Como marca, sea de tipo que sea, es de vital importancia cuidar más que nunca al consumidor, al producto o servicio que ofrece y tratar de que siempre se hable bien. Esto parece tarea fácil, pero no lo es, mucho más cuando, por naturaleza, los humanos tendemos a exteriorizar las experiencias malas mucho antes que las buenas, ya que damos por hecho que esto último es lo esperable y lo primero, un hecho que no debería suceder. 

Ahora bien, ¿qué diferencia hay entre buscar información y contratar seguros por Internet en lugar de hacerlo en un punto de venta físico? ¿Es mejor o peor? ¿Se ofrecen diferentes productos? ¿Dónde existe una mejor atención? 

Veamos todas las ventajas de buscar seguros -sean del tipo que sean- a través de la red y no a la antigua usanza (no sin antes dejar claro que no es ni mejor, ni peor, simplemente es un método de elección distinto al convencional que, a su vez, con el paso del tiempo se está convirtiendo en más normal que el anterior). Pura adaptación tecnológica tanto por parte de las compañías aseguradoras como del consumidor.  

Algunas de las ventajas más reseñables son: 

• Comodidad y accesibilidad: puedes elegir cualquier momento del día para realizar la búsqueda. De camino al trabajo en el metro con tu teléfono móvil, a la hora de la comida o en un momento de relax en casa. 
• Ahorro de tiempo evitando desplazamientos y esperas innecesarias. En las ciudades todo está relativamente cerca pero, ¿qué pasa con la España rural? Tener que acudir a un punto de venta físico puede requerir, en muchos casos, desplazamientos que derivan en la pérdida de una mañana, tarde o incluso un día entero. No todo son grandes ciudades, el nuestro es un país de pequeñas poblaciones y también hay que tenerlas en cuenta y pensar en su comodidad. 
• Facilidad para comparar entre unas compañías de seguros y otras incluso de un solo vistazo. En Internet se puede acceder a tablas comparativas o incluso a comparadores de seguros que realizan búsquedas automáticas y muy precisas sobre un determinado seguro. De esta forma, incluyendo pocos datos, el consumidor puede saber desde cuál va a ser la cuota mensual dependiendo de la compañía hasta cuáles son las coberturas que incluye cada seguro dependiendo de con quién decida contratarlo. Es un proceso sencillo y rápido que puede facilitarnos mucho la vida, ya que a veces no entendemos demasiados términos técnicos relacionados con los seguros y estas herramientas nos lo ponen todavía más fácil. 
• Al hilo de los tecnicismos que acabamos de mencionar, actualmente la mayoría de compañías y corredurías de seguros de este país poseen una página web en la que se puede acceder a atención personalizada de forma rápida y sencilla. Hablamos de la facilidad de acceso a números de teléfono directos, correo electrónico, redes sociales e incluso chats donde se puede hablar en tiempo real con asesores especializados en seguros. Ya pocos esperan a recibir la respuesta a un correo electrónico, ahora puedes dejar tu número de teléfono y en el menor tiempo posible, el servicio de atención al cliente de una determinada aseguradora o correduría de seguros se habrá puesto en contacto contigo para resolver todas las dudas. 
• En cuanto a los precios, las compañías suelen ofrecer las mismas oportunidades y ofertas tanto de forma física como online, si bien es cierto que online es más rápido poder acceder a ellas, sobre todo ante aquellas ofertas que duran un tiempo limitado o solo se lanzan para un determinado número de consumidores. 

En definitiva, aprovechar las ventajas que Internet nos ha regalado es una oportunidad de oro para poder acceder a una información valiosa que, a la larga, puede hasta incluso hacernos ahorrar y también hacernos sentir bien por haber elegido el producto o servicio que más y mejor se haya adaptado a nuestro estilo de vida.