Seguro de alquiler: todo lo que tienes que saber

Seguro de alquiler: todo lo que tienes que saber Alquiler

Con el aumento de los inmuebles que se encuentran disponibles para su alquiler, y el aumento de usuarios que cada vez más se deciden por esta modalidad, se ha producido una evolución en el sector asegurador, buscando una nueva rama de negocio complementaria a los seguros de hogar que, sin duda, ha tenido una alta aceptación: los seguros de alquiler.
Se trata de una cobertura que aunque no muy conocida, se puede encontrar incluida cuando comparamos seguros de hogar, si no en su articulado principal, desde luego en ocasiones como una cobertura adicional. Aún así, no son pocas las compañías que se han decidido por desarrollar un seguro de alquiler específico.

Seguro de alquiler dirigido a propietarios

Quizá hayamos tenido conocimiento de un propietario que ha dejado de recibir las mensualidades acordadas con su inquilino, que de repente ha visto cómo los diferentes suministros de agua y gas han quedado sin pagar… al final el alquiler se ha convertido para ellos en un problema serio. 

El seguro de alquiler dirigido a propietarios busca, en primer lugar, la tranquilidad de quien decide alquilar un inmueble. Por ello, su principal cobertura es asegurar la percepción de las mensualidades acordadas con el inquilino en caso de impago, y proporcionar la defensa jurídica que el propietario puede necesitar para iniciar los trámites legales correspondientes, primero de reclamación de estas mensualidades, y en el peor de los casos, el inicio del trámite de desahucio.  

Pero los seguros de alquiler no se quedan aquí, ya que entre las coberturas se puede encontrar también el pago a las empresas suministradoras de aquellas deudas que el inquilino haya generado por impago de los suministros, o las indemnizaciones que puedan cubrir los desperfectos por actos vandálicos que el inquilino haya podido ocasionar. 

Seguro de alquiler dirigido a inquilinos

Es posible que, como inquilinos, tendamos a pensar que determinados desperfectos estarán cubiertos en la póliza de seguro de hogar de nuestro casero, por lo que, en principio, no parece necesaria la contratación de este tipo de seguros. Sin embargo, no son pocos los inquilinos que han visto que el seguro de hogar de su casero no cubre los daños ocasionados a terceros mientras nosotros alquilamos su vivienda, así que de repente podemos vernos en la obligatoriedad de responder ante estos daños.

El seguro de alquiler para inquilinos puede proporcionar esta cobertura de Responsabilidad Civil, con la que se podrá responder ante daños a terceros. Por otra parte, podemos también incluir la cobertura de defensa jurídica, con la que podremos hacer frente a las reclamaciones judiciales en las que pudiéramos vernos envueltos a raíz de nuestra vivienda alquilada.

Muchos de los seguros de alquiler incluyen también coberturas por robo, o por hurto, proporcionando al inquilino la tranquilidad de saber que no dependerá de las coberturas del seguro de hogar del propietario en caso de sufrir un siniestro así. Incluso podemos encontrar coberturas que respondan ante el deterioro de alimentos refrigerados o que se hayan perdido tras su congelación, así como la de fármacos o medicamentos perdidos. 

Un beneficio para el propietario, pero también para el inquilino

Lo cierto es que podemos pensar que el beneficiario principal de estos seguros de alquiler es el propietario, que tendrá asegurado el cobro de la mensualidad como primera cobertura, además de que dado que muchas de las aseguradoras evalúan la viabilidad del alquiler mediante el estudio de la solvencia del inquilino, se conseguirá encontrar al mejor inquilino para la vivienda.  

Sin embargo, hay que resaltar que el inquilino también puede verse beneficiado por este seguro de alquiler, en particular si decide hacerse cargo del pago de la prima de este seguro. Así, la necesidad de disponer de una cantidad alta de dinero en forma de aval bancario, trámite muy común hasta ahora para acceder a un alquiler, quedaría sustituida por este seguro, que igualmente protege al propietario y que aseguraría de manera diferente el arreglo de desperfectos ocasionados, o el cobro de mensualidades perdidas llegado el caso.