¿Se puede asegurar una vivienda sin cédula de habitabilidad?

Estamos impacientes por habitar nuestra nueva casa, pero ¿podemos tener un seguro si aún no tenemos la cédula de habitabilidad? Automóvil

Asegurar una vivienda sin cédula de habitabilidad no es fácil, ya que es un requisito que la gran mayoría de las compañías de seguros exigen, pero quizá pudieras encontrar alguna opción de seguro que se adaptase a esta situación.

Si estás buscando un seguro de hogar para una vivienda sin cédula de habitabilidad, es fundamental hablar directamente con las compañías aseguradoras y explicar cuál es tu situación específica. Algunas pueden estar dispuestas a darte coberturas, basándose en otros criterios, como las condiciones en las que se encuentre la propiedad y las medidas de seguridad que hayas instalado, pero ya te adelantamos que puede que no sea tarea fácil.

¿Puedo asegurar una vivienda sin cédula de habitabilidad?

Aunque lo normal es que no puedas hacerlo, en ocasiones las compañías de seguros confían en el propietario que desea contratar un seguro para su vivienda y no solicitan la cédula de habitabilidad, entendiendo que se actúa de buena fe. 

Eso sí, ten en cuenta que, si sucediera un siniestro como un incendio o unos daños por agua graves, los peritos encargados de valorar los daños solicitarán una copia de esa cédula de habitabilidad y si la vivienda carece de esta documentación, la aseguradora probablemente no cubriera los daños asumiendo que lo que hubo en el momento de la contratación fue en realidad mala fe.

Ahora bien, si la has solicitado y estás en trámites para conseguirla, además de haber colocado sistemas de vigilancia, cerraduras de seguridad o alarmas de humos, puede que consiguieras asegurar tu casa de manera provisional hasta que la cédula te fuera concedida.

¿Y firmar una hipoteca?

Conseguir una hipoteca sin cédula de habitabilidad puede ser más complicado de lo que creemos. Casi todas las entidades bancarias piden este documento dentro de los requisitos indispensables para solicitar un crédito hipotecario. 

Y contamos, como en toda regla, con una excepción: si la casa que quieres comprar precisa una reforma integral, sí se podría hacer la escritura sin la cédula de habitabilidad, pero tendrás que solicitarla y obtenerla tras la reforma para poder entrar a vivir en ella.

Me han vendido una casa sin cédula de habitabilidad, ¿qué debo hacer?

Si has comprado una casa y te encuentras con que no tiene cédula de habitabilidad, tienes un problema, pero tiene solución. 

Puede que la vivienda no la haya tenido nunca, o que haya caducado, pero sea cual sea la situación, hay que enmendarla, ya que vivir en una casa sin cédula de habitabilidad no es legal y podrían sancionarte.

El vendedor es el responsable de ofrecer una vivienda que tiene toda su documentación legal al día, así que lo primero que debes hacer es contactarle y preguntarle cuál es la situación de la casa a este respecto. Infórmate sobre si ya se ha solicitado esa cédula y si es el caso, por qué aún no se ha concedido. Si tras estas pesquisas te parece que las cosas no están claras, contrata los servicios de un abogado, presentando toda la documentación relativa a la compra de inmueble que tengas en tu poder para que te asesore y sepas qué puedes hacer, cuáles son tus derechos y los pasos necesarios para conseguirla.

Cómo se consigue la cédula de habitabilidad: qué es y requisitos

Este es un trámite que debes realizar en el Ayuntamiento de tu localidad, ya que es un documento administrativo que viene a certificar que se dan las condiciones básicas para habitar la vivienda. Existe para asegurar que el inmueble cumple con unas necesidades higiénico-sanitarias y técnicas mínimas para que se pueda vivir en ella sin que entrañe ningún riesgo. 

Refleja la ubicación y dirección de la casa, la superficie útil, los espacios y habitaciones que la componen y su nivel de ocupación máximo, además de los datos de la persona responsable de certificarlo, aunque puede variar dependiendo de las comunidades autónomas.

Debes obtener la cédula de habitabilidad ya que será requisito imprescindible para realizar gestiones importantes relacionadas con la vivienda

Lo primero que tienes que hacer es solicitar la inspección técnica de esa vivienda, habiéndote asegurado de que cumple con los requisitos considerados como mínimos para que puedas obtener la cédula. Estos requisitos tienen que ver con la estructura, la salubridad y la seguridad de la casa.

Te requerirán alguna documentación, entre la que está la propia solicitud, el justificante de haber abonado la tasa, una fotocopia de tu DNI, la escritura o contrato de alquiler y un certificado de habitabilidad (que conseguirás por medio de un arquitecto o aparejador que esté colegiado y será quien constate las condiciones de la casa y garantice que cumple con los requisitos imprescindibles para habitarla).

Una vez estén dados estos pasos, un técnico del Ayuntamiento visitará la casa y si cumple con los estándares necesarios, emitirá la cédula de habitabilidad.

¿Qué precio tiene conseguir la cédula de habitabilidad?

Este precio depende de variables como la antigüedad de la casa, su ubicación, lo que cobre el arquitecto que vaya a realizar la inspección o las tasas que estipule cada ayuntamiento por realizar este trámite.

De manera general, podemos decir que la cédula de habitabilidad de un piso puede oscilar entre los 65 y los 120 euros, y la de una casa unifamiliar entre los 75 y los 175 euros.

Otras gestiones que no son posibles sin cédula de habitabilidad

Aunque parezca paradójico, dado el tema que estamos tratando, la cédula de habitabilidad es necesaria para vender o alquilar un inmueble. Ahora ya sabes que es importantísimo que el comprador revise toda la documentación y sea él quien exija aquella que falte o no esté en orden, para evitar tener problemas a posteriori.

Además, te la pedirán para contratar los suministros como el agua, la luz o el gas, para pedir una hipoteca y para contratar un seguro o para cobrar la indemnización en caso de siniestro, si no te la habían solicitado al principio. 

Una vez obtengas tu cédula de habitabilidad, lo más aconsejable es comparar seguros de hogar para conseguir uno que se adapte a tus necesidades y circunstancias. Asegura tu casa para evitar llevarte un sobresalto como el de descubrir que no tenías cédula de habitabilidad si ocurre algo inesperado y necesitas que una póliza responda como esperas de ella.