5 ventajas de cambiar la bañera por la ducha

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En este artículo podrás informarte acerca de

A medida que te vas haciendo mayor empiezas a ver los inconvenientes que supone tener una bañera en el cuarto de baño de nuestro hogar; aparte de suponer un mayor consumo de agua, acceder a ellas hace que las personas mayores y con problemas de movilidad corran el riesgo de sufrir un accidente cada vez que se duchan. 

Realizar el cambio de la bañera por un plato de ducha puede resultar costoso ya que este procedimiento suele requerir la realización de una obra de ciertas dimensiones. Sin embargo, si tu bañera ha sufrido alguna rotura o avería puedes consultar con tu seguro de hogar acerca de su sustitución.

Muchas pólizas de seguros de hogar cuentan con coberturas frente a rotura y reposición estética de los sanitarios del baño (bañera, plato de ducha, lavabo, inodoro, etc.). Si es necesaria la sustitución de la bañera quizá puedas llegar a un acuerdo con la entidad aseguradora y solicitar que la sustituyan por un plato de ducha.

Esta es una práctica muy habitual cuando surge algún siniestro que implica la realización de una obra; a veces se puede llegar a un acuerdo con la entidad aseguradora y realizar una reforma del cuarto de baño para modernizarlo o adaptarlo a alguna necesidad. La entidad aseguradora cubrirá los costes de la obra por el importe al que asciendan los daños producidos por el siniestro, la diferencia del coste total de la obra deberás abonarla tú, pero puede resultar más cómodo que empezar la reforma desde cero.

Si aún no cuentas con una póliza de seguros de hogar, recuerda que puedes utilizar nuestro comparador de seguros de hogar para encontrar el seguro que más se adapte a tus necesidades y al mejor precio. También puedes ponerte en contacto con nuestros asesores a través del formulario, haciendo clic en “te llamamos” para que uno de nuestros asesores se ponga en contacto contigo de forma totalmente gratuita y sin ningún tipo de compromiso.

Por qué cambiar la bañera por una ducha

Con el paso del tiempo podemos apreciar cómo van cambiando “las modas” y los cuartos de baño también sufren estos cambios. Antes era común la utilización del bidé y no había ni una casa que no contara con uno, mientras en la actualidad es un sanitario que está en desuso. Lo mismo pasa con la bañera: antiguamente lo más habitual era contar con una bañera en el baño principal de la vivienda y ahora cada vez se ven menos en los hogares.

Limpieza

Los platos de ducha son mucho más cómodos y rápidos de limpiar que las bañeras, ya que la superficie con la que cuentan es mucho menor que la de una bañera, incluso si cuentan con mamparas. 

Peligrosidad

Como ya hemos comentado, tener una bañera en casa puede resultar un gran inconveniente cuando se llega a ciertas edades o cuando se sufre algún problema de movilidad que imposibilita la maniobra de acceso al interior del sanitario. Los bordes elevados de esta hacen que se tenga que elevar la pierna bastante para poder entrar en ella, lo que puede provocar resbalones y caídas muy comúnmente pudiendo provocar lesiones bastante graves e incluso la muerte. Además si la bañera es demasiado profunda debes tener mucho cuidado cuando bañes a un niño ya que pueden producirse ahogamientos involuntarios.

Accesibilidad

Esta ventaja está relacionada con la anterior, los platos de ducha no tienen bordes elevados que haya que salvar para acceder a ellos por lo que entrar y salir de la ducha te resultará muy fácil y cómodo. Como ya hemos dicho, esto es ideal para las personas que cuentan con la movilidad reducida.

Diseño 

En cuanto a nivel estético, tener un plato de ducha aportará a tu baño una mayor sensación de amplitud; además estéticamente aporta un aire mucho más moderno. En la actualidad existen infinidad de materiales y diseños con los que podrás adaptar el diseño de tu plato de ducha al conjunto del baño.

Ahorro 

Si eres del tipo de persona que quiere ahorrar en el consumo de agua, pero no puede resistirse a darse un baño cada vez que ve su bañera, recuerda que si no la tienes no habrá posibilidad de pensar en esos largos baños. Esta es una de las principales ventajas de realizar el cambio, puesto que notarás un ahorro enorme en la factura del agua y además estarás aportando tu granito de arena en la protección del medioambiente 

Si estás dudando acerca de si deberías cambiar tu bañera por un plato de ducha, ten en cuenta todas las ventajas que el cambio puede ofrecerte, pero también debes sopesar los inconvenientes que pudiera suponerte el cambio; como el tener que realizar obra en la vivienda. El cambio de bañera a plato de ducha requiere la realización de trabajos de albañilería y fontanería y dependiendo del tamaño del baño y de los tipos de materiales que hayas elegido la reforma conlleva un mínimo de 2 a 3 días de obra.

Recuerda que puedes consultar con tu entidad aseguradora si con tu póliza de seguros de hogar existe la posibilidad de llegar a un acuerdo en el caso de que el cambio se quiera realizar por la ocurrencia de un siniestro en nuestro sanitario. Si aún no cuentas con un seguro de hogar puedes ponerte en contacto con nuestros asesores, que te ayudarán a elegir la póliza de seguros que más te convenga según tus necesidades, consulta sin ningún tipo de compromiso y totalmente gratis.

También debes tener en cuenta tanto si tienes bañera como si tienes plato de ducha lo importante que es ahorrar en el consumo de agua: esto no solo beneficiará a tu bolsillo, sino que estarás contribuyendo a reducir el impacto que creamos en el ecosistema. Ahorrar en el consumo de agua también supone reducir considerablemente la contaminación y el consumo de combustible. Para reducir el consumo de agua puedes cerrar el grifo mientras te estás enjabonando o no llenar la bañera del todo (si la tienes) cuando te apetezca darte un baño.