Diccionario de seguros

Auxiliar asesor del mediador

El auxiliar asesor del mediador es una figura que se aprobó en la Ley de Economía Sostenible del 4 de marzo de 2011, atendiendo a la demanda del sector de los corredores de seguros, ya que esta figura ampliaba las competencias del auxiliar externo, que estaba más limitado en el desarrollo de determinadas funciones. 

En concreto, el auxiliar asesor del mediador tiene entre sus tareas y funciones la labor no sólo de captar comercialmente clientes para el mediador (función principal del asesor externo) sino que además ayuda al propio mediador, en la gestión y formalización de contratos de seguros, tramitación de siniestros, o asistencia en la gestión de estos.  

¿Para qué sirve el auxiliar asesor del mediador?

Es importante subrayar que la formación requerida para el desempeño de las tareas de esa figura no es la misma que la del asesor externo, sino que debe ser más amplia y especializada ya que, como decíamos, las competencias requeridas son más extensas y por lo tanto tiene que estar preparado para dar respuesta a cualquier situación que le plantee el mediador, o el propio cliente final. Lo que se les requiere a los Auxiliares Asesores del mediador es al menos estar en posesión de la titulación de graduado en educación secundaria o equivalente. Adicionalmente, deberán haber realizado una formación específica del sector de al menos 200 horas (esta estaría encuadrada en el Grupo B al igual que los agentes exclusivos de seguros).

Siendo una figura externa a la empresa, trabaja de forma exclusiva con el mediador y conlleva incompatibilidades con otros mediadores, como es lógico, ya que si no se perdería esa independencia e integralidad que requiere el puesto y que debe dar tanto al propio mediador como al cliente. 

El auxiliar asesor del mediador trabaja tanto con el cliente como con el dicho mediador con la mayor transparencia posible

El auxiliar asesor del mediador es por lo tanto una figura externa que va a ayudar al mediador en la gestión de los clientes no sólo comercialmente sino también en las tareas administrativas que ello conlleva. Se trata de que al cliente final se le dé un servicio completo que comenzaría con la captación del propio cliente para presupuestar un seguro de coche. El siguiente paso sería la gestión o tramitación de la documentación y firma de la póliza de seguro para el mediador. Cuando este cliente, además tenga algún siniestro o complicación con la póliza, el propio auxiliar asesor del mediador ayudará al cliente y al mediador en la gestión que conlleva todo el siniestro, desde indicarle al cliente cómo debe tramitar con la compañía de seguros el siniestro, hasta hacer llegar al mediador la documentación necesaria para la tramitación del mismo. 

Por todas estas funciones se ha convertido en un papel imprescindible a tener en todas las corredurías, especialmente en las pequeñas corredurías, donde el mediador muchas veces no es capaz de llegar de manera eficiente a todos sus clientes. Con esta figura el mediador consigue dar un servicio más completo y dinámico. Por otro lado, para el cliente es totalmente transparente, ya que el auxiliar asesor siempre va identificar para qué mediador trabaja en exclusiva, y el cliente va a contar con la garantía adicional del propio mediador que respalda al asesor.