Daños que pueden causar las termitas

Las inundaciones, las tormentas fuertes o los incendios están en la lista de nuestras peores pesadillas. Pero si bien las condiciones meteorológicas pueden llegar a derribar un edificio, hay unas criaturas minúsculas, llamadas termitas, que pueden causar también un gran daño.

Estos pequeños insectos forman colonias masivas que devoran las estructuras físicas de las construcciones. El daño de las termitas es bastante costoso e incluso presenta riesgos potenciales para la salud. 

Las termitas se alimentan de materiales vegetales muertos o en descomposición, incluida la madera. Si bien cada una de ellas es muy pequeña, una colonia de termitas es muy poderosa. Estos grupos trabajan continuamente y los miembros que los componen viven en un festín constante las 24 horas del día, llegando a consumir casi 7 kilos de madera por semana.

Además, las termitas no solo se comen la madera. Aunque sea su manjar favorito, una colonia de estos insectos también puede roer yeso, revestimientos de metal y aislamientos.

En la naturaleza, el trabajo de las termitas es derribar árboles viejos en los bosques para dejar espacio y que crezcan nuevas plantas. Sin embargo, en una casa, los hábitos de alimentación de las termitas pueden causar daños físicos, económicos y sanitarios.

Cierto es que, a no ser que vivas en una idílica cabaña hecha de madera, en el campo o en algún bosque, las termitas tendrían que afanarse mucho para echar abajo los cimientos de las casas que habitamos en las ciudades. Pero hay que pensar en todas esas casas en los pueblos, alojamientos rurales, etc., que hacen de la madera un elemento indispensable para la decoración de un ambiente rústico y que son objetivo potencial de estos insectos.

Una colonia de termitas puede causar daños estructurales generalizados. Las plagas se alimentan de estructuras internas, incluidas las vigas y los postes de la pared. En casos severos donde las termitas no son detectadas con prontitud, estos insectos acaban por hacer de tu hogar un lugar inseguro e inhabitable.

Las termitas pueden causar daños importantes en la estructura de tu casa, además de afectar a tu salud si tienes algún tipo de alergia

Viven y viajan por el suelo gracias a la humedad. Entran en una casa generalmente a través de los cimientos y una colonia muy grande puede crear grietas en esos cimientos de una casa, causando daños importantes.

Las termitas de Formosa, consideradas las más dañinas, son una subespecie de termitas que construyen nidos en el suelo. Causan estragos en el interior de las paredes y donde la madera esté lo suficientemente húmeda para que ellas puedan sobrevivir.

Piensa que las zonas de tu hogar donde hay más humedad atraen antes a las termitas. Por eso se acusan daños importantes en cuartos de baño, así que fíjate en baldosas sueltas o agujeros en paneles de yeso. 

Las termitas que habitan en las paredes empiezan a comer de adentro hacia afuera. Las paredes se volverán huecas y se debilitarán, lo que puede provocar daños por agua en tu casa. En este momento es cuando te acordarás de tu seguro de hogar, aunque más adelante verás que también tiene que ver con el tema de los insectos que se han adueñado de tu casa…

Otro detalle que puedes observar es que, como viven justo bajo la superficie, si has pintado alguna zona de tu casa y tienes termitas, su actividad creará burbujas y levantará la pintura.

Además de los daños estructurales causados por las termitas, también hay riesgos para la salud que debemos considerar. Las termitas no son una amenaza directa para las personas, pero su presencia en la casa puede tener efectos nocivos para nuestra salud.

Si te encuentras con una colonia de termitas, ten cuidado. Algunas especies pueden morder y picar. Eso sí, quédate tranquilo porque las mordeduras pueden ser dolorosas, pero no son tóxicas.

En otro orden de cosas, los alérgicos verán incrementados sus síntomas ya que por la destrucción que se está fraguando dentro de las paredes o los suelos, se crea inevitablemente polvo y las partículas de la madera roída flotan en el aire y las inhalamos al respirar. Por eso alérgicos y asmáticos deben tener especial cuidado.

Los daños estructurales que las termitas crean en tu casa son un suma y sigue. Nos enfrentamos a varios gastos, comenzando por la empresa de control de plagas que debemos contratar para que extermine la colonia de bichitos y terminando por las cuadrillas de profesionales que vendrán detrás a reparar los destrozos causados por los insectos. 

La buena noticia es que los seguros de hogar cubren los tratamientos que hay que aplicar para acabar con las plagas. Eso sí, no todas las compañías ni todas las pólizas disponen de esta cobertura y las que sí lo hacen, limitan a dos o tres las intervenciones anuales. Por eso, siempre es bueno realizar una comparativa de seguros de hogar antes de decidirse por el primero que encontremos y comprobar con atención las coberturas que nos ofrecen.

En las comunidades de vecinos se hacen muchas veces inspecciones regulares cada cierto tiempo para verificar preventivamente que las zonas comunes están libres de plagas.

Estas comunidades acostumbran a contratar seguros cuyas pólizas cubran estas eventualidades y que así, una potencial exterminación de plagas esté contemplada.

Si aún no contáis con ella en tu comunidad, habla con el presidente para proponer en la próxima reunión de vecinos varios presupuestos de seguros que sí la contemplen o tratar de añadir al que ya tenéis una cláusula que sí la cubra. Contáctanos y nuestros expertos te asesorarán acerca del seguro que más convenga a tu situación.

El mejor tratamiento contra las termitas, una vez instaladas, es el que puede hacerte una empresa especializada. Probablemente encuentres algunos remedios caseros, pero verás que en todos ellos se precisa la utilización de elementos como el ácido bórico o la gasolina, si no hablamos de alguno que sugiere utilizar un tipo de gusanos para erradicarlas. 

Estos componentes parecen, cuando menos, peligrosos como para utilizarlos sin ser un profesional de la materia y los gusanos pueden acabar con tus termitas, pero… ¿cómo nos deshacemos luego de ellos? Mejor ir a lo seguro.  

Lo que sí puedes es actuar en materia de prevención, reduciendo la cantidad de madera que ha entrado en contacto con tierra. 

No guardes leña o madera en el interior o cerca de tu casa. Desecha papeles viejos, cartón y plantas marchitas de inmediato. Reduce el exceso de humedad arreglando las fugas de agua inmediatamente. Mantén los desagües y sumideros limpios y despejados para impedir que el suelo esté muy húmedo.

Plantéate también hacer inspecciones rutinarias con un equipo certificado o infórmate a fondo de las señales que debes buscar. Si descubres termitas, llama a tu seguro de hogar, recuerda que los especialistas pueden acabar con ellas antes de que causen daños físicos, económicos o a tu salud.

Aunque ambas atacan a la madera, las primeras tienen cabeza definida, seis patas, antenas, pueden tener alas y son blancuzcas. Carcoma es como se denomina a las larvas de algunos tipos de escarabajos que se nutren de la madera, por lo que su aspecto es de gusano arqueado y con un cuerpo anillado. 

Dependiendo de las señales que encuentres en tu casa, podrás intuir qué plaga te está atacando. La carcoma deja agujeritos abiertos muy redondos y perfectos, con restos de serrín. Si hablamos de termitas, los agujeros aparecerán con barro, porque los tapan después de hacerlos y arrojar sus excrementos fuera (puedes apreciar este tipo de excrementos en el suelo de tu casa), pero no encontrarás serrín. 

Coge el teléfono y llama a tu seguro si descubres alguno de estos indicios, porque son quienes mejor podrán ayudarte y enviarte a los profesionales cualificados que terminen con tu pequeña gran pesadilla.