¿Puedo cambiar el seguro de hogar que está vinculado a la hipoteca?

Hombre firmando documentación junto a una maqueta de una vivienda unifamiliar Trucos del Hogar

¿Comprar una vivienda con una hipoteca o vivir toda la vida de alquiler? Esta es una de las grandes causas divisorias de la sociedad actual, como quien prefiere la playa a la montaña o es más de río que de mar.

Hay personas que se aterrorizan solo con pensar en la gran responsabilidad que supone contratar una hipoteca, sumado a todo lo que conlleva a lo largo del tiempo como la cuota mensual, tener un seguro de hogar asociado, e incluso uno de vida, más un determinado producto como, por ejemplo, un sistema de alarma por un periodo determinado de años con el fin de rebajar el importe del seguro y los intereses del préstamo hipotecario.

Solo por no disponer de esa atadura con una entidad bancaria, prefieren no tener nunca una propiedad, evitando el precio a pagar y muchos se decantan por la opción de vivir de alquiler con total libertad. En parte por el alto precio de las viviendas y en parte por las obligaciones e imposiciones del banco, muchos no contemplan una hipoteca en su estilo de vida. Normalmente, esto suele coincidir con personas urbanitas, amantes de los viajes y con un estilo de vida un poco nómada.

Ahora bien, en la otra cara de la moneda están aquellos que harían lo que fuera por disponer de una vivienda en propiedad. En España, aunque cada vez menos a causa de los altos precios de los inmuebles, este es el pensamiento que sigue primando en relación a la propiedad. Tener una casa es uno de los grandes métodos para ahorrar e invertir un dinero que, viviendo de alquiler, quedaría en el olvido.

Las hipotecas de hoy en día suelen llevar unos productos asociados con el fin de abaratar su cuota mensual, es decir, en lugar de tener unos intereses altos, las entidades ofrecen este tipo de productos junto con el préstamo hipotecario, que harán que los intereses sean más bajos, pero que seguirán siendo un añadido que, a veces, ni tan siquiera nos habíamos parado a pensar en contratar.

Nos referimos a esos productos como alarmasseguro de hogar e incluso seguros de vida que el propio banco ofrece. Es importante valorar si disponer de estos productos sale rentable y, si es así, ¿por qué no?

El seguro de hogar no es obligatorio en España y los bancos no pueden obligarte a contratarlo con ellos al pedir la hipoteca, aunque sí lo es tener un seguro contra incendios

A continuación, resolvemos todas las dudas relacionadas con la hipoteca y el seguro de hogar, ¿es obligatorio contratar ambos a la vez? ¿Ha de ser con la compañía que decida el banco? ¿Puede elegir el propietario de la vivienda las coberturas? ¿Es obligatorio el seguro de hogar para hipotecar una casa? Te lo contamos.

¿Qué es un seguro de hogar vinculado a la hipoteca?

Es una póliza que cubre al menos el continente (la estructura) y, habitualmente, la Responsabilidad Civil. El banco lo exige para asegurar su inversión: si ocurre un incendio u otro siniestro grave, la propiedad estará protegida, garantizando que el préstamo quede cubierto.

Aunque se suele asociar directamente con el préstamo, no hay obligación legal de contratarlo con el mismo banco; lo que sí es obligatorio es tener una póliza mínima que cubra daños al inmueble. El seguro vinculado puede venir con extras útiles (daños por agua, robo, RC…), pero también puede encarecer la hipoteca si no se compara bien.

¿Es obligatorio contratarlo con el banco?

No, como hemos comentado, no es obligatorio contratar el seguro con el banco, aunque muchas entidades ofrecen rebajas en el tipo de interés si lo haces. Esto puede dar la impresión de que es condición indispensable, pero por ley tú decides la aseguradora, siempre y cuando la póliza cumpla con los requisitos que el banco marque (como mínimo incendio y valor del continente).

Si contratas con otra compañía, no deberías perder las condiciones pactadas del préstamo; tu nueva póliza debe entregarse al banco con al menos un mes de antelación a la renovación para que dejen de aplicar la anterior. Eso sí, es importante hacer cuentas, ya que a veces la reducción en tipos puede compensar más que el precio de la póliza externa, pero muchas veces ocurre justamente lo contrario.

¿Cómo puedo cambiar el seguro de hogar vinculado a la hipoteca?

A diferencia de hace unos años, a día de hoy ningún comprador está obligado a contratar un seguro de hogar con la entidad bancaria con la que contrata la hipoteca. Ahora bien, en la mayoría de los casos, tener una póliza de hogar es un requisito indispensable para que el banco te conceda una hipoteca, aunque sea con la cobertura mínima de incendios que se encargue de proteger el continente de la vivienda.

Antes de contratar una hipoteca, es fundamental realizar una comparación de seguros de hogar para saber cuál es la póliza que más se adapta a tus necesidades y, a su vez, confrontarla con la que te ofrece el banco y estudiar la diferencia de precio que resultaría del seguro que ofrece el banco en la hipoteca o cuánto sería el precio de la hipoteca con el seguro que tú hubieras contratado por tu cuenta.

Puede parecer un proceso algo tedioso, pero aseguramos que merece mucho la pena realizarlo siempre que puedas ahorrar un dinero que, al cabo de los años, puede representar una cantidad interesante.

Si decides contratar la hipoteca con el seguro que te ofrece el banco, probablemente pagues menos intereses, pero si no te convence siempre podrás cambiar de tipo de seguro e incluso añadir más coberturas.

¿Tengo que esperar un tiempo para desvincularlo?

Si ya has contratado la hipoteca asociada a un seguro de hogar y quieres cambiarlo, tendrás que esperar al vencimiento anual de la póliza y avisar un mes antes de esa fecha a la entidad bancaria para que esté al tanto y no se renueve de forma automática, como suele ocurrir en la mayoría de ocasiones.

Para ello has de seguir varios pasos:

  • Infórmate de la fecha de fin de vigencia de la póliza para avisar en el momento adecuado.
  • Compara entre todos los seguros de hogar del mercado para elegir el más conveniente para tu tipo de vivienda y estilo de vida.
  • Aporta a tu banco toda la información necesaria en relación con la nueva póliza de hogar que has adquirido justo antes de que la antigua haya vencido. Aunque cada caso puede ser diferente en función de la entidad bancaria, por regla general, hasta que no se presente toda la documentación, el banco no anulará el vencimiento del seguro antiguo. Además, puede solicitar otros requisitos. La compañía aseguradora con la que hayas contratado el nuevo seguro para tu vivienda podrá activar dicha póliza justo en el momento que ambos acordéis. Lo mejor en estos casos es tener una reunión con el banco y otra con la nueva aseguradora para tramitar todo de forma más completa y ágil.

¿Me sube la hipoteca si quito el seguro de hogar?

Si decides quitar el seguro de hogar que viene vinculado con tu hipoteca, ten en cuenta que el banco suele ofrecer una bonificación en el tipo de interés si contratas este seguro con ellos. Si lo cancelas, lo común es que pierdas ese descuento, lo que se traduce en una hipoteca más alta.

La subida no suele ser dramática, por lo general unos pocos puntos básicos (0,05 - 0,2 %), lo que se nota como unos pocos euros al mes.

La clave está en comparar, ya que, si el seguro externo te sale mucho más barato, puede que te compense, incluso pagando algo más en la hipoteca. Pero revisa bien tu contrato para ver cuánto bonifican y simula el impacto.

Ventajas de elegir un seguro de hogar fuera del banco

Contratar tu seguro de hogar con una aseguradora externa (o correduría) en lugar de con el banco tiene varias ventajas claras:

  • Mejor precio: las pólizas bancarias suelen ser más caras. Por ejemplo, entidades especializadas ofrecen precios hasta un 79 % más bajos.
  • Coberturas más flexibles: puedes personalizar coberturas según tus necesidades reales (daños por agua, robo, asistencia…) en vez de quedarte con un paquete cerrado.
  • Asesoramiento experto: las corredurías te guían en elegir y tramitar la póliza, y gestionan siniestros, algo que el banco no hace.
  • Independencia y transparencia: no estás atado a una única oferta; puedes cambiar de compañía sin que el banco te penalice.

Cómo elegir el mejor seguro para tu hipoteca

Partiendo de lo anterior, así puedes elegir bien:

  1. Compara precios vs bonificación bancaria: calcula la diferencia entre la prima externa y lo que pierdes de descuento en la hipoteca al dejar la póliza del banco. Si la póliza externa cuesta mucho menos, suele compensar.
  2. Verifica las coberturas mínimas exigidas: el banco normalmente solo pide continente, daños por agua e incendio. Asegúrate de que la póliza externa cumpla al menos con esos requisitos.
  3. Personaliza según tu hogar: elige coberturas según tu realidad, si vives en una zona sin robos, quizá no necesites ese extra. En cambio, una calefacción antigua o una mascota sí pueden exigir garantías específicas.
  4. Asesoramiento y gestión: opta por corredurías o aseguradoras que ofrezcan apoyo al cliente, como ayuda en siniestros, atención clara y gestión rápida.
  5. Revisa la letra pequeña: ojo con franquicias, límites por siniestro, exclusiones (mascotas, fenómenos atmosféricos), antigüedad máxima de los electrodomésticos, etc.
  6. Flexibilidad para cambiar: asegúrate de poder cambiar o cancelar sin penalización, notificando con un mes de antelación y entregando la nueva póliza al banco antes de la renovación.
  7. Valora la experiencia del contratante: revisa opiniones y reputación de la aseguradora o correduría: su atención, rapidez y transparencia importan.

Con estos pasos, eliges un seguro que protege bien tu casa, puede salirte más barato que el del banco y se adapta a tu hipoteca sin compromisos innecesarios.

¿Qué pasa con el seguro si amortizo o cancelo la hipoteca?

Si al fin liquidas tu hipoteca, sea habiéndola terminado en plazo o pagando por adelantado, puedes seguir con el seguro de hogar vinculado, cambiar a otra modalidad o mejorar coberturas. Aunque ya no tengas hipoteca, seguirás pagando en función de lo que cubra la póliza y la compañía elegida.

Tu primera decisión será:

  • Mantener el seguro actual, adaptándolo si quieres más coberturas.
  • Contratar un nuevo seguro, que puede ser también un seguro para propietarios o un seguro para segunda vivienda, si la casa ya no es tu residencia habitual o pasa a un uso diferente.
  • Mejorar coberturas, especialmente Responsabilidad Civil y daños al contenido y continente, que suelen ser básicos en los seguros de banco.

Sea cual sea tu elección, seguirá siendo obligatorio tener un seguro si la hipoteca está vigente, pero tras cancelar la hipoteca ya no existe obligación legal; simplemente, lo más interesante es mantener una póliza adecuada.