Remedios naturales para desparasitar perros

Si tienes un perro y eres fan de lo natural, aquí te dejamos algunos consejos para que lo desparasites. Mascotas

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Solo aquellos que han tenido un perro alguna vez son incapaces de expresar con palabras lo enriquecedor que es para las personas; a veces, resulta difícil encontrar los adjetivos necesarios para definir algo tan grande. El más puro y sincero amor es el que un perro te da, y a cambio de nada. La sensación de llegar a casa y ver su recibimiento, saberle sufrir cuando tú también sufres o su simple compañía, todo suma. Se llega a un nivel tan grande de empatía y complicidad que es difícil de describir. De lo que sí estamos seguros es de que muchas personas prefieren ese amor y compañía que prestan los perros, antes que la de algunos de sus iguales.

Ahora bien, tener un perro supone una responsabilidad y requiere estar plenamente concienciado de que ha de estar bien cuidado durante toda su vida: no estamos hablando de un capricho pasajero, hablamos de un ser vivo y hay que tratarle como tal con sus cosas buenas y sus cosas menos buenas. 

A los perros les encanta pasear, descubrir rincones e ir rozándose con todo lo que pueden por la calle, sobre todo aquellos machos cuya obsesión se basa en marcar por encima de todo. Ese es uno de los momentos más peliagudos de cara a coger algún bichejo inesperado, ya que el hecho de ir a marcar sobre los rastros que haya dejado otro perro, a veces requiere acercarse a superficies como farolas o setos donde no hace mucho, se ha restregado otro perro.  Otras de sus grandes aficiones son mordisquear objetos como los muebles y olfatear todo aquello que se les permite olfatear, ahí pierden la noción del tiempo. 

Todas estas aficiones caninas, además de llevarlos a parques para perros, la naturaleza o a otras aventuras igual de divertidas y beneficiosas para ellos, pueden exponer al animal al peligro de que algunos incómodos huéspedes se alojen en su cuerpo

Estos nuevos habitantes pueden alojarse en dos partes diferentes del cuerpo del perro. Una es la interior, por ejemplo, en intestinos y pulmones, es la menos común pero no por ello inexistente. Lo recomendable para evitar los inquilinos que se alojan en el interior es dar cada cierto número de meses una pastilla de desparasitación al perro, preguntando al veterinario cuál es la dosis recomendada para tu mascota y durante cuánto tiempo, porque, aunque los remedios caseros sean útiles, en estos casos “que no podemos ver”, es mejor evitar males mayores. 

El lugar más común donde suelen alojarse los parásitos en los perros es en el exterior, es decir, en la piel o entre el pelo según qué razas. 

¿Cómo se llaman estos visitantes? La mayoría de vosotros seguro que sabéis a lo que nos referimos: lombrices, gusanos, garrapatas, pulgas… Son muchos parásitos diferentes los que pueden alterar la salud de tu mascota. 

Por todo ello, disponer un seguro de mascotas adecuado para tu perro -mucho más si es de alguna raza en la que tener contratado un seguro de mascotas que cubra la responsabilidad civil es obligatorio- es más que recomendable. Está muy bien conocer aquellos viejos trucos de la abuela por si en un momento dado los necesitamos y podemos hacer algo antes de llevar al perro a la revisión de un profesional. Pero, aunque el seguro de mascotas no cubre concretamente este caso, sí que actúa en otras situaciones como el robo, el hurto, el extravío o accidentes. Situaciones donde una póliza puede resultar de gran utilidad. 

Imagina que te sucede en unas vacaciones en el campo o en cualquier otro lugar alejado de tu vivienda; en primer lugar, hay que llamar al seguro de mascotas para solicitar una cita con un veterinario y, si no se puede conseguir porque estás lejos para una consulta de urgencias o vuelves en unos días a tu residencia habitual, con los consejos de antaño tendrás un as bajo la manga. Presta atención a estos trucos caseros de toda la vida que en muchas ocasiones pueden ser suficiente ante un problema de parásitos, aunque siempre es recomendable llevar a tu mascota al veterinario ante estos casos para que, al menos, confirme si puedes seguir llevando a cabo estas medidas o necesitas refuerzo químico en forma de medicación. 

Remedios naturales para desparasitar perros

 
  • Aceite de árbol de té y aloe vera: se puede aplicar esta mezcla a tu mascota después de bañarle con su champú de siempre. Su característico olor es perfecto para eliminar los parásitos del perro, además de que es una buena forma de hidratar la piel de nuestra mascota.
  • Poleo: esta hierba que usamos como infusión resulta ser muy útil contra las garrapatas. Puedes esparcir hojas secas de esta hierba en la cama de tu mascota.
  • Lavanda, eucalipto y camomila: esparce semillas de estas plantas en la cama de tu perro o coloca bolsitas que rellenes con ellas. También puedes plantar estas especies si tienes jardín en casa, si tu mascota pasa tiempo allí y puede estar en contacto con esta vegetación. 
  • Levadura de cerveza: muchos especialistas en nutrición canina recomiendan incluirla en su dieta porque potencia su sistema inmunológico y les aporta hierro, proteínas, y vitamina B, entre otros.
  • Hervir agua con cáscaras de limón: una vez hervida la cáscara de limón puedes bañar a tu perro con este preparado que repele muchos parásitos
  • Vinagre de manzana: si aplicamos un chorro sobre el manto de pelo del animal tras el baño ayudará a mantener a los parásitos lejos de tu mascota y proporcionará brillo y fuerza a su pelaje.

Todos estos remedios naturales para desparasitar perros, además de ser eficaces, están al alcance de cualquier persona, son fáciles de conseguir, sencillos de poner en práctica y muy económicos si los comparamos con otro tipo de productos elaborados en laboratorios y que están presentes en el mercado listos para ser comprados.

Ahora bien, como comentábamos anteriormente, es recomendable conocer trucos de este tipo porque pueden ayudarnos en un momento dado, pero no por ello debemos olvidarnos de acudir a un centro veterinario una vez nos demos cuenta de que nuestro perro se está rascando demasiado o que su tránsito intestinal no actúa con normalidad. Al final, nosotros somos los que mejor le conocemos y tenemos que hacer todo lo que esté en nuestra mano para hacer que mejor y, si podemos eliminar de raíz los parásitos que habitan sobre o dentro de él, mejor.