Trucos para desintoxicar tu cuerpo en 21 días

En este artículo podrás informarte acerca de
Que septiembre y enero son los meses por excelencia en los que más planes detox se inician no es ninguna novedad. Los días posteriores a las maravillosas vacaciones de navidad y verano son el momento de volver a encontrarnos con la báscula o con aquellos vaqueros en los que antes de las vacaciones sí entrábamos. A veces, no se trata de haber engordado una barbaridad sino de sentirnos hinchados, pesados y fatigados, una sensación que muchos conocemos y odiamos.
Estas sensaciones no tienen porqué darse solo a la vuelta de fechas especiales en las que hemos variado nuestra dieta habitual si no que, a veces, sea por estrés o por la vorágine del día a día, llevamos una dieta tan poco saludable que, cuando nos damos cuenta, ya solo queda ponerse manos a la obra y cambiar todos los hábitos de raíz.
Ahora bien, antes de comenzar, es recomendable realizar un plan detox para tratar de eliminar las impurezas del organismo de forma rápida y saludable. Para que un plan de este tipo sea un éxito, no debe durar más de 21 días. Lo ideal en estos casos es incorporar rutinas que se queden con nosotros para siempre. Además del aspecto físico, estamos hablando de cuidar la salud y, aunque tengamos un buen seguro de salud que nos mantenga al día en cuanto a análisis clínicos y revisiones periódicas, somos nosotros mismos los que debemos preocuparnos por seguir una alimentación saludable que nos mantenga siempre en nuestro peso y medidas óptimas.
En los periodos vacacionales cambiamos nuestras rutinas alimenticias por otras muy apetitosas, pero más desorganizadas y menos saludables. Esto nos lleva a terminar las comidas con cierta sensación de pesadez.
Los días pasan, nuestro cuerpo lo acusa y acabamos ganando un poco de peso (en el mejor de los casos). Luchar contra estos kilitos de más no es nada difícil, solo es cuestión de tener un poco de voluntad. Muchos especialistas aseguran que solo se necesitan 21 días para que una rutina se convierta en hábito.
Siguiendo esta máxima, a continuación, vamos a detallar algunos trucos o nuevos estilos de vida que incorporar en tu día a día; una vez hayan pasado los 21 días pertinentes, habrán pasado a formar parte de tu rutina. Si los nuevos hábitos incorporados son saludables, estarás recuperando la línea casi sin darte cuenta.
Qué hábitos saludables podemos llevar a cabo durante 21 días
Ante todo, debemos tener en cuenta que los consejos que vamos a dar a continuación son perfectos tanto para desintoxicar el cuerpo durante un tiempo determinado de 21 días, como para incorporar nuevos hábitos saludables para siempre. En ambos casos, no hay que abusar de aquellos que no nos aporten la energía necesaria para afrontar nuestro día a día con normalidad. Por tanto, si el plan detox va a durar 21 días, podremos ser un poco más agresivos en su puesta en práctica que si estos trucos van a pasar a formar parte de nuestra dieta habitual, ya que entonces lo haremos de forma más progresiva. Toma nota:
Tomar un vaso de agua tibia con limón exprimido
Hacer esto cada mañana en ayunas es un paso casi obligatorio y muy seguido en la actualidad. Trata de no tomar nada más hasta que pasen treinta minutos para que sea efectiva la limpieza de tu aparato digestivo. Una vez semanalmente, prueba a hacer esto mismo añadiendo una cucharadita de bicarbonato en vez de limón.
Llevar a cabo cenas ligeras 3 horas antes de ir a dormir
Incluir un yogur griego al día en tu dieta habitual
Si lo prefieres también puedes incluir kéfir en formato yogur. El cuerpo agradecerá la dosis diaria de prebióticos.
Camina al menos media hora al día
Así la circulación se activa y se elimina grasa. No hay actividad más asequible, sencilla y útil para perder peso, sentirnos en forma y mejorar nuestra capacidad pulmonar que la de salir a caminar cada día.
Incorporar el agua en formato infusión
De esta forma estarás bebiendo sin darte cuenta si no eres de esos que beben el agua que deberían beber cada día.
Incorpora suplementos alimenticios naturales en tu dieta
A partir de los 30, el organismo ya no fabrica como antes determinadas sustancias, por ejemplo, el colágeno. Esto favorece el cansancio y que no podamos realizar las actividades que nos gustaría poder seguir haciendo.
Trata de no tomar alimentos como pan, lácteos y pasta
Y si lo haces, que sea integral y acompañado de verduras.
Incorpora semillas, tofu y alimentos como la quinoa a tu dieta
Esta última es una digna candidata a ser sustituta del arroz o la pasta, así podrás variar más tus recetas habituales incluyendo menos calorías.
Realiza 5 comidas de menor cantidad
Aunque no lo creas, el organismo quema más calorías cuando está trabajando. La fruta y los frutos secos son perfectos para media mañana y media tarde. Durante el proceso detox, es mejor evitar cualquier alimento que contenga calorías y, si puedes, sustituye alguno de los alimentos por una infusión o té.
Lo ideal es no tener sensación de hambre durante todo el día. Cuando tenemos “demasiada” hambre, al final comemos mal, porque intentamos saciarnos con lo primero que encontramos o aquello que no requiere tiempo de cocinado; buscamos algo rápido sin pararnos a pensar en si es o no saludable. Curiosamente, como seguro que alguna vez te ha pasado, esto que se come de forma impulsiva para saciar la sensación de hambre de forma rápida, no suele ser fruta o verdura, sino cualquier snack que solemos tener en casa, por ejemplo, patatas fritas o cualquier otro procesado industrial.
Si crees que tú solo no vas a poder con este plan y no tienes aún un seguro de salud, puedes elegir uno que se ajuste a ti usando nuestro comparador de seguros médicos, o hablando con nuestros expertos, que te aconsejarán de entre las diferentes opciones de seguros médicos de una compañía tan puntera en el sector como es Adeslas.
En definitiva, lo que todos debemos tener claro es que nadie va a cuidar de nuestra salud como nosotros mismos, y que mantener el peso, además de la salud, es sencillo si sabemos organizarnos y cambiar nuestros hábitos y estilo de vida. Eso no quiere decir que nos olvidemos de comer aquello que más nos gusta, tomarnos un vino o una cerveza un domingo al aperitivo o no probar el postre en una comida familiar. Llevando una dieta saludable no tendremos porqué realizar planes detox de 21 días y sabremos compensar esos excesos. Si por ejemplo hemos salido a comer con amigos, por la noche evitaremos una cena muy copiosa; todo es cuestión de buscar el equilibrio, no de eliminar aquello que nos gusta para el resto de nuestra vida.