¿Qué tipos de fallecimiento cubre un seguro de vida?

Los seguros de vida son una de las tipologías de seguros más reconocidas en la sociedad española. Todos conocemos a alguien que cuenta con un producto de este tipo, pero ¿sabemos cuáles son realmente sus características? Por paradójico que parezca, un seguro de vida se relaciona con la muerte o con aquellos temas relacionados con la existencia o la integridad de las personas, y siempre interesa saber qué tipo de muerte cubre un seguro de vida, aunque parezca un juego de palabras. En este artículo, aclaramos todo mejor y respondemos a la pregunta que planteamos en el titular. 

En un seguro de vida, el tomador del seguro, el asegurado y el beneficiario, no tienen por qué ser la misma persona, es decir, el asegurado es sobre quien recae el riesgo de seguro y el beneficiario es quien recibe la indemnización, atendiendo a las condiciones prefijadas previamente en la póliza. El tomador, por su parte, es quien suscribe y paga el seguro.

Se trata de una póliza que tiene como principal objetivo la protección económica de la familia en el caso nos ocurra alguna desgracia, intentando compensar, en la medida de lo posible, cualquier situación derivada de tal hecho. 

Muchos de vosotros os estaréis preguntando, ¿es lo mismo un seguro de vida que un seguro de accidentes? No, aunque dependiendo de la compañía en cuestión pueden tener coberturas comunes, un seguro de vida y un seguro de accidentes no son lo mismo. En el caso del seguro de accidentes, se contempla una indemnización por muerte o incapacidad temporal o permanente del tomador del seguro a causa de un accidente entendido como un hecho que deriva de una causa violenta, súbita, externa y ajena a la intencionalidad del asegurado. Sin embargo, un seguro de vida tiene en cuenta diversas causas, ya sean accidentes o enfermedad, a la hora de indemnizar al beneficiario por muerte del asegurado. 

Un seguro de vida tiene en cuenta diversas causas a la hora de indemnizar al beneficiario por muerte del asegurado

La persona que decide contratar una póliza de vida lo hace con el fin de vivir con la tranquilidad que genera saber que, cuando no esté en este mundo o se encuentre incapacitado por una causa accidental, su familiar o familiares beneficiarios recibirán una indemnización y tendrán, con ello, protección económica. 

Tampoco es conveniente confundir un seguro de vida con uno de decesos ya que este último se encarga, principalmente, de los gastos directos relacionados con un fallecimiento, como, por ejemplo, tanatorio, transporte, trámites de carácter administrativo… Los familiares no tendrán que hacerse cargo de nada. También es un producto bastante valorado ya que, en esos momentos tan duros, para nadie es plato de buen gusto tener que organizarlo todo.

Un seguro de vida cubre tanto un fallecimiento natural como provocado por accidente o enfermedad. Dicha indemnización queda estipulada previamente entre el tomador del seguro y la compañía aseguradora en el momento de la contratación. 

Ahora bien, como siempre recomendamos, en este tipo de seguros es conveniente revisar bien la letra pequeña y dejar todo bien claro con la compañía que se haya elegido. De esta forma, evitaremos llevarnos alguna sorpresa desagradable. Por ejemplo, hay algunas compañías que no cubren una muerte causada por la práctica de deportes considerados de riesgo. Tampoco el suicidio, al menos durante el primer año de vigencia de la póliza en la mayoría de los casos. Por eso, es recomendable estudiar bien todo antes de firmar, ya que hay varias exclusiones por las que no te cubrirá un seguro de vida, como negligencias en la conducta o realizar actos que se consideren temerarios, abuso de drogas que puedan terminar en el fallecimiento del asegurado, o muertes a consecuencia de un esfuerzo físico en competiciones deportivas, por ejemplo.

Si estás pensando en contratar una póliza de este tipo, recomendamos que contactes con un asesor experto en seguros de vida como los que encontrarás en El Corte Inglés Seguros. Te propondrán una alternativa que encaje con lo que buscas y así, puedas satisfacer completamente tus necesidades.