¿Qué cotos de caza hay en Córdoba?

A pesar del parón que vivió el mundo durante lo más duro del confinamiento el año pasado, la caza está resurgiendo con fuerza. El negocio se vio afectado por las dificultades que había en cuanto a la movilidad, el temor del aficionado ante los contagios y que los restaurantes dejaron de demandar carnes de caza para sus cocinas, igual que descendieron las exportaciones.

Con todo, las monterías de carácter local han sufrido menos, frente a las que se alimentaban de cazadores llegados de fuera de nuestro país, que se movían llamados por los ojeos de perdiz y la caza de cabras montesas.

La baja actividad cinegética trae consigo, también un aumento de la población de animales como el jabalí, con un incremento asimismo de accidentes motivados por su causa.

Si quieres volver a cazar, si eres de los que hicieron un pequeño parón durante ese tiempo y vas a retomarlo de nuevo, no olvides comprobar la vigencia de tu seguro de cazador, con el que te podemos ayudar desde El Corte Inglés Seguros.

En la comunidad autónoma de Andalucía, se autorizan las siguientes modalidades de caza mayor:

• Montería: es una cacería que se organiza colocando puestos fijos, que se lleva a cabo con batidores y rehalas en una zona del monte que se cerca con anterioridad por los cazadores, siempre que sean más de 25. 
• Gancho: también organizada con puestos fijos, los cazadores serán 25 como máximo, también utilizando rehalas y batidores.
• Batida: expresamente organizada para corzos, jabalíes o zorros con puestos fijos, sin límite de superficie, número de rehalas o cazadores.
• Batida de gestión: puede ser ayudada por perros (o no), para controlar la población de especies de caza mayor o control de daños, tomando las medidas que garanticen la conservación del hábitat de las especies y la seguridad de la gente.
• Rececho: el cazador, solo o en compañía de otros, debe buscar las piezas sin ayuda de los perros, a no ser los que se usen para que sigan el rastro de las piezas heridas- ni ojeadores. Los días en que haya nieve, se podrá autorizar la caza de cabra montesa en cotos de alta montaña.
• En mano: pensada para la caza del jabalí; aquí un grupo de cazadores que pueden o no llevar perros, buscan sus piezas recorriendo el terreno. Ha de estar compuesto por 8 o menos cazadores que irán acompañados de 15 perros como máximo por día. Generalmente, no se puede usar rifle en esta modalidad.
• Aguardo diurno: los cazadores deben esperar en sus puestos específicos a que los animales acudan de manera espontánea.
• Aguardo nocturno: este tipo de aguardo se refiere en exclusiva para el jabalí, donde se espera en un puesto fijo y se hace, haciendo gala a su nombre, de noche.

Carboneras del Valle se sitúa en Alcaracejos, a menos de una hora de Córdoba en coche, cuenta con más de 2.000 hectáreas y un perímetro de casi 30.000 metros, vallada casi en su totalidad con una malla cinegética de unos dos metros de alto y dispone de pasos cada 50 metros aproximadamente para fauna que no tiene que ver con la caza.

Esta finca se dedica a la actividad cinegética principalmente, pero sirve para desarrollar actividad ganadera relacionada con el vacuno, porcino u ovino, ya que las características que presenta su vegetación son idóneas para ello.

Está dotada de un perímetro transitable que hace más fácil el trabajo de vigilancia y control y posibilita la revisión del cercado, además de disponer de toda una red viaria en buen estado para poder moverse por la finca.

En la propiedad, con varias edificaciones tanto de tipo residencial como de almacenaje, hay todas las máquinas necesarias, así como tractores o coches que se pueden utilizar para su mantenimiento.

Se puede practicar la caza mayor, entre la que destacan la calidad de ciervos o jabalíes, que acumulan gran número de trofeos en las temporadas que se han llevado a cabo aquí.

Existen alrededor de diez comederos para ciervos y otros tantos para jabalíes, que se reparten por toda la extensión de la finca de manera que no se concentre un gran número de animales alrededor de uno de ellos, minimizando los riesgos de que se estropee la vegetación circundante o que se transmitan enfermedades.

En cuanto a la caza menor, la perdiz roja, la tórtola común, la paloma torcaz, el zorzal común o la liebre son especies que abundan en Carboneras del Valle.

Puerto del Toro se encuentra en Villanueva del Rey. Un poco más pequeña que la anterior, suma más de 1.600 hectáreas de terreno y se considera de las mejores fincas en nuestro país por la mucha caza menor que allí habita y la altísima calidad de los trofeos conseguidos dentro de sus límites.

Completamente vallada, cuenta con unos setenta kilómetros de red viaria y como en la anterior, un perímetro desde el que se puede controlar el total de la superficie de la finca. También tiene 5 torres destinadas a la vigilancia en lugares estratégicamente planteados. Encontramos pequeños pantanos a lo largo de su extensión, a los que se suman pozas y puntos naturales de agua donde podemos encontrarla todo el año. Así, los animales no harán grandes desplazamientos para poder beber.

Las especies que pueblan Puerto del Toro son el muflón, el gamo, el corzo, el ciervo y el jabalí, que componen la variedad de caza mayor que podemos encontrar allí.

La prolífica caza menor que comentábamos párrafos más arriba se compone, como en el Coto anterior, de torcaces, tórtolas, perdices rojas, liebres, conejos y zorzales.

En este caso, contamos con 15 comederos para ciervos y el doble para jabalíes, que se reparten por la extensión de la finca.

Entre la vegetación que podemos encontrar, veremos encinares, tanto con pasto como con matorral mediterráneo, además de casi 60 hectáreas de olivares ecológicos.