¿El seguro de hogar cubre la televisión?

Cómo nos ha cambiado la vida en apenas unas décadas. 50 años de historia no es nada y, durante estos últimos, la sociedad española ha vivido tantos cambios y progresos que podríamos escribir decenas de libros.

Aquellas generaciones que vivieron en su juventud la llegada del televisor todavía relatan con orgullo y cierta nostalgia cómo era aquello de reunirse con la familia cada noche para ver un rato de tele. Eso sí, en blanco y negro y sin canales donde elegir. Ahora, las nuevas generaciones lo imaginan con cierta sensación de pena o compadeciendo aquellos tiempos, pero la realidad es que era algo único. Hoy en día ya nada se vive con aquella intensidad y emoción, esa era parte de la magia. 

Hasta que no pasaron algunos años desde su aparición, ni siquiera había un televisor por hogar, sino que aquella familia afortunada que podía permitírselo era la encargada de invitar a vecinos y allegados para ver la televisión todos juntos. ¡Imaginad cómo fueron aquellos minutos viendo la llegada del hombre a la luna! Parece tan lejano y es a la vez tan reciente que el paso del tiempo unido al progreso, genera vértigo. 

Hoy en día, raro es el hogar en el que no haya mínimo 2 televisores. Además, cada uno cuenta con más de 25 canales y, a veces, no sabemos ni qué ver… Si aquellas generaciones pudieran haber viajado al futuro, seguro nos hubieran dicho un par de cosas… 

Tratándose de un aparato electrónico tan importante para la mayoría de los hogares nos preguntamos, ¿el seguro de hogar ofrece algún tipo de cobertura relacionada con el televisor? Si se estropea, sea por el motivo que sea, ¿el propietario de la vivienda tendrá que solucionarlo por su cuenta o tendrá algún tipo de ayuda por parte del seguro de hogar que tenga contratado? Seguro que muchos de vosotros os lo habéis preguntado alguna vez.

Nos encontramos ante una de las cuestiones más comunes que, tarde o temprano, se realiza todo aquel que tiene un seguro de hogar o aquellos que están investigando el mercado porque se encuentran en el proceso de decisión de compra para elegir una póliza de seguro de hogar. La tele es un elemento muy importante en los hogares de hoy en día y, además, es un componente valioso, ya que los televisores de última generación son tan sofisticados en cuanto a diseño y prestaciones que su valor es mayor si los comparamos con los de hace unos años. 

En este sentido, pensar en que se pueda estropear ya sea por una avería de carácter técnico o por un accidente fortuito no nos hace ninguna gracia. 

En términos de seguros, la respuesta es un tanto subjetiva, ya que todo depende de la compañía aseguradora con la que se haya contratado el seguro de hogar, así como del tipo de póliza elegida. Además, a cada tipo de póliza se le pueden añadir un tipo de coberturas extras según los gustos o estilo de vida de cada hogar y, por tanto, cada póliza se convierte en única, ya que pueden realizarse casi de forma personalizada. Tampoco es conveniente generalizar entre todas las compañías, ya que es frecuente que haya diferencias o matices entre unas y otras. 

Dicho esto, la respuesta a la pregunta que nos venimos haciendo desde el inicio del artículo es positiva; es decir, por regla general (aquí entran las variaciones que comentábamos anteriormente) el seguro de hogar sí se hace cargo de la reparación o sustitución del televisor en caso de que el siniestro/accidente se haya producido por alguna de las causas pactadas en la póliza. El tomador detalla todo aquello que quiere asegurar de su hogar a la hora de contratar una póliza y, el seguro se hará cargo del valor asegurado en cada caso. Por ejemplo, si la tele del salón ha costado 1.525 euros, es normal que el seguro, sea de la compañía que sea, no responda con una cuantía superior a la hora de su reparación y, por tanto, si el coste de arreglar la tele es superior a su valor, seguramente se procedería a la sustitución de un televisor nuevo igual o de las mismas características técnicas. Insistimos, todo depende de cada compañía y cada tipo de póliza.

Es conveniente señalar en este punto que, a la hora de contratar un seguro de hogar, el tomador ha de diferenciar entre contenido y continente. 

• El continente es todo aquello que forma parte de la estructura de la casa como las ventanas, paredes, suelos e incluso sanitarios o muebles anclados a la pared como, por ejemplo, los de la cocina (esto también puede variar dependiendo de la compañía). Digamos que se trata de todo aquello que no se movería en caso de que agitaras la vivienda con la mano como si de una coctelera se tratara. 
• El contenido es todas aquellas posesiones que el asegurado tenga dentro de la vivienda, como los muebles, aparatos electrónicos, menaje, ropa o electrodomésticos. Cómo no, la televisión formaría parte del contenido de una vivienda. 

Por tanto, si el seguro contratado cubre el contenido de la vivienda, por norma general, sí se haría cargo de la reparación o sustitución de la televisión siempre y cuando la causa estuviera dentro de las contempladas en la póliza. Por ejemplo, si se ha estropeado por un accidente relacionado con la meteorología como puede ser un rayo o incluso si le ha caído un objeto por accidente. 

Además de la cobertura relacionada con el contenido, existen determinados seguros de hogar en los que se puede añadir una póliza específica para la televisión o para cualquier otro pequeño o gran electrodoméstico. 

Por último, otra cobertura frecuente que también se haría cargo de la reparación de la tele es la relacionada con la de daños eléctricos. Así, si ha dejado de funcionar a consecuencia de corrientes anormales o cortocircuitos de red, el seguro, normalmente,  también se hace cargo. 

Como vemos, la televisión es un elemento tan importante que incluso en los seguros más básicos puede quedar cubierta, aunque lo conveniente es revisar todo bien antes de decantarse por una compañía u otra, así como entre la infinidad de pólizas que hay en el mercado para tener la tranquilidad de tener la tele asegurada. 

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