Sistemas de seguridad pasiva en el coche
En este artículo podrás informarte acerca de
Por desgracia, hablar del uso de un vehículo lleva consigo de forma implícita hablar del riesgo de poder sufrir un accidente al volante. Cada vez se crean nuevas medidas de seguridad que de formas muy diversas intentan minimizar la cantidad de accidentes de tráfico como pueden ser los controles de velocidad o los radares fijos, los controles de alcohol o de drogas, o la propia concienciación de la población mediante anuncios televisivos, radio o carteles en las carreteras.
Aún así, existen dos términos muy conocidos referentes a las protecciones que otorga un vehículo en sí mismo, diferenciados en función del momento en el que entren en acción, la “seguridad activa” y la “seguridad pasiva”.
En este artículo nos centraremos en la seguridad pasiva, dado que es la que comienza a funcionar una vez ya haya ocurrido el accidente (cuando esté ocurriendo, realmente), con el fin de proteger a los ocupantes del vehículo. Por otra parte, se debe resaltar que la seguridad activa está compuesta por todos los sistemas que previamente habrían intentado prevenirlo, como el ABS o el control de presión de los neumáticos.
Una vez el siniestro ya es inevitable, contar con la protección que suponen los sistemas de seguridad pasiva es imprescindible para evitar consecuencias irreparables para los ocupantes del vehículo, así como lo puede ser contar con un seguro de coche que permite no generar mayores complicaciones para el conductor, sobre todo en el caso que el accidente sea culpa suya.
¿Qué es el sistema de seguridad pasiva?
En resumen, podríamos decir que es el sistema diseñado para minimizar los posibles daños que sufran los ocupantes una vez haya sucedido una colisión. Este sistema se compone de elementos destinados a evitar o atenuar las lesiones graves que puedan sufrir los ocupantes tratando de reducir la mortalidad tras un accidente.
Los elementos de seguridad pasivos entrarán en acción cuando los elementos activos no hayan logrado evitar el siniestro.
La seguridad se ha ido convirtiendo en un factor clave a la hora de adquirir un nuevo vehículo. Ya no resulta tan importante el precio de este, ahora el comprador desea tener la tranquilidad de contar con un coche lo más seguro posible, al igual que ocurre a la hora de comparar seguros para el coche, a veces es mejor pagar algo más, pero contar con la mejor cobertura.
¿Qué elementos del vehículo componen los sistemas de seguridad pasiva en un coche?
Por supuesto, cada día se inventan nuevos dispositivos que se suman a los que ya forman el sistema de seguridad pasiva en un coche, dado que una de las mayores preocupaciones de los conductores es sin duda su propia seguridad y la de sus familiares y amigos que puedan viajar con ellos.
Hoy por hoy, se prefiere gastar más en seguridad que en cualquier otro factor del vehículo.
Los cinturones de seguridad, los reposacabezas o el airbag son los tres grandes aliados de los conductores dado que su efectividad ha sido demostrada en incontables pruebas. No obstante, no son los únicos elementos que forman el sistema de seguridad pasiva. A continuación, veremos los que hoy por hoy se repiten con mayor frecuencia:
Cinturón de seguridad
Sin duda, uno de los sistemas de seguridad pasiva con mayor eficiencia. Su uso está completamente normalizado por cualquiera que se suba en un vehículo puesto que desde hace décadas se considera la medida que más vidas ha salvado, reduciendo casi a la mitad el número de personas que fallecen en accidentes de tráfico, según datos oficiales.
Limitador de cinturón y pretensores
Siguiendo con el anterior elemento, el limitador se encarga de bloquear el cinturón ante un impacto una vez este se haya ajustado correctamente para que no ceda. Además, el pretensor tensa dicho cinturón de forma automática para que se ciña al cuerpo en caso de ocurrir una colisión.
Airbag
Se trata de otro de los sistemas de seguridad pasiva que ha logrado salvar la vida de millones de usuarios en accidentes de tráfico. Su innegable eficacia viene dada por su ingenioso diseño. Los airbags son bolsas que permanecen ocultas bajo el volante, embellecedores, guanteras y, cada vez más, en los propios laterales interiores del vehículo para proteger al resto de pasajeros y no solo a conductor y copiloto. Si sucede que el vehículo sufre un impacto de cierta gravedad, estas bolsas se hinchan en un tiempo mínimo (inferior a un segundo) y de esta forma permiten amortiguar el golpe que sufrirían los ocupantes contra las zonas más duras del vehículo.
Reposacabezas
Aunque no todo el mundo lo sabe, se trata de un elemento de seguridad de gran importancia debido a que minimiza la posibilidad de sufrir un latigazo cervical en los casos en los que ocurra una colisión por alcance.
Corte de inyección
Evitar que el vehículo se incendie tras un accidente resulta vital para salvar la vida de sus ocupantes. Por esto existe un sistema encargado de cortar el flujo de combustible en el caso de que alguna línea de inyección se destruya.
Sistemas de retención infantil
Normalmente se trata de sillas a medida que ayudan a que el cinturón de seguridad haga su función correctamente, dado el pequeño tamaño del niño y a que los cinturones están diseñados para adultos.
Cristales y lunas
En la actualidad se utilizan cristales laminados que evitan que, tras una rotura, se rompan en mil pedazos pudiendo dañar a los ocupantes del coche.
Chasis y carrocería
El mayor logro dentro de los avances en seguridad es crear habitáculos que no puedan deformarse por dentro. El objetivo es que la parte externa absorba la mayor parte del impacto, evitando que llegue a afectar en tanta medida a las personas que se encuentren dentro del vehículo en el momento del impacto.
Sistemas de protección al peatón
Últimamente, podemos encontrar también diversos sistemas de seguridad que permiten que, tras un atropello, la carrocería se deforme de tal manera que se absorba la mayor parte del golpe en el coche y no en el cuerpo de la persona atropellada.
eCall
Se trata de una propuesta de la Unión Europea que pretende conseguir minimizar el tiempo que se tarda en que lleguen los servicios de emergencia al lugar del accidente.
Hablamos de un sistema automatizado que contenga antecedentes médicos de los afectados, estado en el que se encuentran tras el siniestro o lugar exacto del accidente entre otros, con el fin de poder prestar una mejor atención y de forma mucho más rápida.
La seguridad es un factor clave a la hora de desarrollar cualquier actividad en la vida por lo que contar con protecciones adecuadas y con el mejor seguro siempre será una buena idea.