Trucos para el mantenimiento del aire acondicionado del coche

Panel del aire acondicionado de un vehículo Trucos para el mantenimiento del aire acondicionado del coche

Con la llegada del calor, pocos elementos se agradecen tanto en el coche como un buen sistema de aire acondicionado funcionando a pleno rendimiento. Sin embargo, muchas veces no le prestamos la atención que merece hasta que deja de enfriar como debería o aparece algún olor desagradable al encenderlo.

El mantenimiento del aire acondicionado no solo mejora la comodidad al volante, sino que también contribuye a la eficiencia del vehículo y a la calidad del aire que respiramos en su interior. Realizar revisiones periódicas, recargar el gas cuando sea necesario o sustituir el filtro del habitáculo son gestos sencillos que pueden marcar la diferencia.

Repasemos por qué es importante cuidar este sistema y qué medidas básicas conviene tener en cuenta para alargar su vida útil y asegurar un funcionamiento óptimo durante todo el año.

5 consejos para el mantenimiento del aire acondicionado

Cuando llega el verano y subes al coche, lo último que quieres es que el aire acondicionado falle. Para evitar sorpresas desagradables y mantener tu sistema en óptimas condiciones, sigue estos consejos:

Enciende el aire acondicionado también en invierno

Aunque no lo necesites para enfriar, poner en marcha el aire acondicionado en invierno es clave para mantenerlo en buen estado. Bastan unos minutos cada dos semanas para activar el compresor y hacer circular el gas por el sistema. Esto evita que las juntas de goma se resequen y ayuda a prevenir fugas y obstrucciones. Además, al mantener los conductos activos, se reducen los malos olores y la humedad acumulada. Incluso puede usarse para desempañar los cristales en días fríos o lluviosos.

Cambia el filtro del habitáculo con regularidad

El filtro del habitáculo es el encargado de purificar el aire que entra en el interior del coche, atrapando polvo, polen y otras partículas. Con el uso, este filtro se va saturando, lo que puede reducir el caudal de aire, generar malos olores e incluso afectar a la salud, especialmente si hay personas alérgicas a bordo. Por eso, es recomendable cambiarlo al menos una vez al año o según las indicaciones del fabricante. Un filtro limpio mejora la calidad del aire, ayuda al sistema de climatización a funcionar mejor y evita que el motor del ventilador trabaje forzado.

Ventila el coche antes de encender el aire acondicionado

Cuando el coche ha estado al sol, la temperatura interior puede superar fácilmente los 50 °C. Si encendemos directamente el aire acondicionado, este tendrá que trabajar el doble para enfriar el habitáculo, lo que supone un mayor consumo de energía y un desgaste innecesario del sistema. Por eso, se recomienda abrir puertas y ventanillas durante uno o dos minutos antes de activar el aire. Así se libera el aire caliente acumulado y el sistema de climatización enfría más rápido y de forma eficiente. Es un gesto simple que mejora el confort y cuida el aire acondicionado.

Revisa la carga de gas refrigerante si notas que enfría menos

El gas refrigerante es esencial para que el aire acondicionado enfríe correctamente. Con el tiempo y el uso, es normal que su nivel disminuya ligeramente, lo que se traduce en una menor capacidad de refrigeración. Si notas que el aire tarda más en enfriar o no llega a alcanzar una temperatura adecuada, es posible que necesite una recarga. Este procedimiento es rápido, económico y debe realizarse en un taller especializado, donde también comprobarán si existen fugas. Mantener la carga de gas en niveles óptimos mejora el rendimiento del sistema y evita averías más graves a largo plazo.

Aprovecha las ofertas de mantenimiento antes del verano

Muchos talleres lanzan promociones especiales antes del verano, justo cuando más se necesita que el aire acondicionado funcione perfectamente. Estas ofertas suelen incluir revisiones del sistema, recargas de gas a precio reducido o descuentos en la sustitución de componentes como el filtro del habitáculo. Estar atento a estas campañas puede suponer un importante ahorro y, además, permite detectar a tiempo posibles fallos. Aprovechar estas revisiones preventivas no solo es una forma inteligente de cuidar tu bolsillo, sino también de asegurarte de que el sistema funcione correctamente durante los meses de más calor.

¿Cómo te puede ayudar tu seguro de coche?

Contar con un seguro de coche que incluya una revisión anual de seguridad gratuita, como los que te ofrecemos en El Corte Inglés Seguros, puede ser una ventaja significativa para mantener tu vehículo en óptimas condiciones. Esta revisión preventiva permite detectar posibles fallos mecánicos o eléctricos antes de que se conviertan en costosas averías, asegurando así tu tranquilidad al volante.

Una revisión anual gratuita puede ayudarte a detectar fallos en el aire acondicionado antes de que de problemas en pleno verano

Además, estas pólizas suelen ofrecer otros beneficios, por lo que sus ventajas no solo contribuyen al mantenimiento eficiente de tu coche, sino que también representan un ahorro económico considerable a largo plazo.

¿El seguro cubre averías del aire acondicionado?

Si el aire acondicionado del coche deja de funcionar, ¿lo cubre el seguro? La respuesta depende de si se trata de una avería por desgaste, mal uso o falta de mantenimiento, cuando lo habitual es que no esté incluida en la póliza, o si el sistema se daña como consecuencia de un siniestro (por ejemplo, tras un golpe), caso en que si tienes un seguro a todo riesgo, es más que posible que sí esté cubierto.

Seguros El Corte Inglés ofrece distintos niveles de cobertura. Con el seguro de coche básico estarás cubierto ante lo obligatorio por ley, pero no frente a averías mecánicas. Por otro lado, un seguro a terceros ampliado añade coberturas como robo, incendio o lunas, aunque tampoco cubre el aire acondicionado salvo que el daño esté relacionado con uno de esos supuestos. En cambio, con un seguro a todo riesgo sí puedes tener cubierta la reparación si el aire falla tras un accidente.

Además, como ya has visto antes, con cualquiera de estas pólizas puedes acceder a una revisión anual gratuita, una ventaja muy útil para detectar posibles problemas antes de que den la cara en pleno verano. Por eso es muy recomendable que, a la hora de contratar una póliza nueva, realices una comparación de seguros de coche, con el fin de escoger aquel cuyas coberturas se adapten mejor a tus necesidades.

¿Cuándo utilizar la recirculación de aire?

El botón de recirculación del aire en tu coche, ese que tiene el icono de un cochecito con una flecha en bucle, es más útil de lo que parece. Su función principal es cerrar la entrada de aire exterior y hacer que el sistema de climatización utilice únicamente el aire del interior del habitáculo.

¿Y cuándo conviene activarlo? Por ejemplo, en días de calor intenso, si usas la recirculación, el aire acondicionado enfría más rápido, ya que no tiene que trabajar con el aire caliente del exterior. También es útil en atascos o al pasar por zonas con malos olores o contaminación, ya que evita que esos agentes entren al coche.

Sin embargo, no es recomendable mantenerlo activado todo el tiempo. Si se usa de forma prolongada, puede generar humedad en el interior y empañar los cristales. Por eso, es aconsejable alternar entre la recirculación y la entrada de aire exterior, especialmente en trayectos largos.

¿Cada cuánto tiempo es recomendable revisar el aire acondicionado?

El sistema de aire acondicionado del coche es esencial para garantizar una conducción cómoda y segura, especialmente durante los meses de calor intenso. Para asegurar su funcionamiento óptimo, se recomienda realizar una revisión completa al menos una vez al año, preferiblemente antes del verano. Esta revisión debe incluir la verificación de la presión del gas refrigerante, la inspección del compresor y la comprobación del estado del filtro del habitáculo.

Y recuerda que es aconsejable encender el aire acondicionado periódicamente durante el invierno para mantener en buen estado los conductos y evitar obstrucciones por inactividad prolongada.