¿Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico?
En este artículo podrás informarte acerca de
Los coches eléctricos llevan años planteando una solución al transporte contaminante que durante el último siglo ha causado consecuencias medioambientales nefastas para el planeta en su totalidad. En muy poco tiempo, se han posicionado como la elección de preferencia de los conductores que deciden adquirir un vehículo nuevo haciendo así que, poco a poco, su presencia en las calles aumente acercando el futuro a nuestro día a día.
Algunas dudas sobre cuánto puede valer el seguro de un coche eléctrico o qué coberturas especiales puede y debe tener, cuánto cuesta cargar el coche en sí o qué facilidades podemos tener por adquirir uno se repiten cada vez con más frecuencia, lo que es señal de que el mundo mañana será un poco más “eco” gracias a nuestras decisiones de hoy.
Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico en España
Por desgracia, en boca de todos está lo difícil que resulta seguir el ritmo de los precios de la luz en nuestro país y, lamentablemente, se trata de un ciclo que se retroalimentará con el paso del tiempo, dado que cada vez habrá menos recursos y mayor demanda.
Por eso una duda razonable antes de adquirir un coche eléctrico es saber si vamos a poder hacer frente al desembolso en la factura de la luz. Pues bien, si decidimos instalar un punto de carga en nuestra propia vivienda nos costará entre mil y mil quinientos euros aproximadamente, pero hablamos de cantidades variables en función de las necesidades de cada ubicación. Una vez estuviera instalado el siguiente paso sería renegociar nuestro suministro eléctrico para que pudiera hacer frente a su nueva tarea: cargar nuestro coche. Hoy en día encontramos tarifas divididas en tramos horarios que permitirán saber en qué momento gastaremos menos y en cuáles será mejor evitar recargar nuestro vehículo, pero, haciendo un análisis general, cargar el coche en casa no debería suponer un incremento en la factura que suponga mucho más de, aproximadamente, 215 euros al mes (siempre teniendo en cuenta las necesidades y especificaciones de cada coche en particular).
Tener un punto de recarga en casa no implica que deba ser obligatoriamente dentro de nuestro hogar: pueden instalarse también en garajes comunitarios o compartidos sin que sea necesaria la aceptación del resto de usuarios o vecinos (aunque es recomendable preguntar al presidente de cada comunidad de propietarios).
En el caso de cargar el coche fuera de casa, las tarifas rondan los 0,50 euros por kWh, lo que supone un coste de alrededor de 20 euros para 40 kW, mientras que en casa podemos obtener tarifas de hora valle que se encuentran entre 0.0126 euros por kW/día y 0.0092 euros kW/día en los casos más económicos.
El cable de carga del coche eléctrico
Al contar con un vehículo eléctrico o híbrido enchufable el cable de carga es un elemento fundamental. Su coste suele situarse entre los 150 y los 300 euros, aunque existen opciones más caras y que despiertan el interés de los ladrones. Siempre se debe contar con un seguro que cubra específicamente tanto el vehículo como los elementos esenciales que le rodean, por eso tanto los seguros Coche Esencial El Corte Inglés, Coche Óptima El Corte Inglés y Coche Supra El Corte Inglés disponen de una versión ECO que se ciñe a las necesidades que los coches híbridos enchufables y eléctricos presentan.
¿Está cubierto por el seguro?
Tanto con la modalidad Coche Supra El Corte Inglés, así como con el seguro Coche Óptima El Corte Inglés dispondrás de cobertura por robo del cable de recarga dentro de sus condiciones. Además, contarás con acceso a talleres especializados en reparar coches eléctricos y una asistencia en carretera adaptada a sus necesidades entre otras muchas ventajas. No lo dudes, compara tu seguro de coche eléctrico y empieza a disfrutar de una ventaja más de haberte pasado al lado ECO.
¿Cuánto tarda en cargarse un coche eléctrico?
Como media, podemos hablar de que un coche eléctrico puede tardar entre cinco y ocho horas en cargarse completamente, aunque este es un tiempo estimado variable en función de muchos factores relacionados tanto con el vehículo como con el punto de recarga y con el propio cargador.
La carga lenta es la más frecuente en el uso doméstico (cuando se carga el coche en casa) y puede tardar hasta 8 horas en completarse si se realiza a unos 3,7 kW (mínimo para cargar el coche) pero se puede agilizar hasta las 4 horas que tardaría utilizando 7,4 kW (potencia recomendada) y necesita una corriente monofásica.
En segundo lugar, encontramos la carga semi rápida, la menos frecuente, que suele durar desde una hora a máxima potencia (22 kW) hasta un máximo de tres horas utilizando la potencia mínima de 11 kW. Este tipo de carga necesita una corriente trifásica de 400 V.
¿Y en una gasolinera?
Si te estabas preguntando cómo puede alguien esperar hasta 8 horas a que su coche se recargue por completo en mitad de un viaje, la respuesta está en que existen opciones de carga mucho más ágiles y se encuentran precisamente en las estaciones de servicio que encontramos repartidas por las carreteras de nuestro país.
Antes de viajar prepara tu ruta teniendo en cuenta los puntos de recarga, así como su potencia y precios
Estas cargas rápidas permiten que tu vehículo se cargue hasta un 80% en una media hora utilizando una potencia de 50 kW, aunque, en algunos casos menos frecuentes, incluso en menos de 10 minutos podrás reemprender tu viaje si utilizas un punto de recarga que ofrezca los 150 kW de potencia necesarios de los llamados puntos de recarga ultra rápida y dispones de un vehículo que permita su uso.
Carga rápida: ¿cómo hacerlo?
Las cargas más rápidas las podemos encontrar en estaciones de servicio. No todos los coches están preparados para todos los tipos de carga por lo que se debe de tener claro cuál es la potencia idónea de recarga para la batería de nuestro vehículo.
Generalmente las cargas de potencia de unos 200 kW rondan los 0,50 €/kWh y, si se trata de 350 kW se acerca a los 0,90 €/kWh.
Tipos de cargadores
Hoy en día existen muchos tipos de cargador para los coches eléctricos y cada uno posee un conector distinto. Es importante saber que de ello dependerá la velocidad a la que se cargue la batería, pero también que, lógicamente, no todos ellos son compatibles con todos los coches eléctricos.
Tipo Schuko: es el conector doméstico habitual y su potencia es muy limitada. Recomendable sólo en caso de híbridos enchufables.
Tipo 1: este conector sí está indicado para coches eléctricos puesto que con sus hasta 7.4 kW puede cargar en su totalidad una batería de 50 kWh en unas 7 horas.
Tipo 2 o Mennekes: mucho más frecuente en España y Europa que el anterior, alcanza hasta 44 kW y ofrece un amplio abanico de tiempos de carga, pudiendo ser muy lento o tener un coche con la carga completa en aproximadamente una hora.
Tipo CCS o combinado: es el tipo de conector más extendido en Europa puesto que sus potencias entre 43 kW y 50 kW permiten cargar un coche de 50 kW/h en una hora más o menos. Existen cargadores que superan los 100 kW pudiendo alcanzar los 350 kW, pero, hoy por hoy, su disponibilidad es muy reducida.