¿Cuándo es mejor tomarse la tensión?
La tensión, como conocemos a la presión sanguínea, podría definirse como la fuerza que ejerce el flujo de sangre sobre las arterias. Es más alta cuando el corazón late y bombea sangre hacia las arterias y más baja entre un latido y otro. Es completamente necesario que exista tensión arterial para que todo funcione correctamente, pero si se da un exceso o un defecto de ella podemos vernos afectados por enfermedades cardiovasculares.
La tensión además no es constante; varía en función de muchos factores como estar en reposo o haber hecho esfuerzos, llevar una vida activa o ser sedentario, y desde luego puede tener consecuencias para la salud si se tiene mucho estrés, si se consumen estimulantes como mucho café y, por supuesto, si se consumen alcohol o drogas.
Por eso, tomarse la tensión es un buen hábito para conocer cómo está nuestro cuerpo. Si bien es cierto que no todo vale, y hay que seguir una serie de recomendaciones para hacerlo bien y no obtener resultados erróneos o inexactos.
Te contamos cómo tomarte la tensión tú mismo y cómo puede ayudarte a mejorar tu vida contar con un seguro de salud.
¿En qué momento es mejor tomarse la tensión?
Los expertos suelen recomendar medir la tensión por la mañana, en condiciones tranquilas, lo cual conlleva no hablar, estar en un ambiente relajado, no haber hecho esfuerzos físicos anteriormente ni haber fumado, así como no haber comido al menos una hora antes.
Estas indicaciones son lo habitual pero no quiere decir que sean las únicas. Si una persona tiene sospechas de tener la tensión alterada de algún modo, es muy posible que el especialista le recomiende hacer varias mediciones durante el día para observar cómo afectan los hábitos o la medicación pautada en los valores obtenidos.
Consejos para tomarse la tensión en casa
Tomarse la tensión en casa o, si lo decimos de forma más técnica, la automedición de la presión arterial, es algo muy frecuente. Hoy en día contamos con aparatos para esta medición que son fiables y bastante exactos y que no requieren de grandes conocimientos sobre el tema. Se trata de medidores electrónicos muy sencillos de utilizar con resultados claros y muy rápidos.
Hay que controlar los valores alterados de tensión, sean altos o bajos
Existe un efecto que podemos evitar si nos tomamos la tensión en casa, que se conoce como “hipertensión de bata blanca”. Este ocurre cuando estamos frente a un sanitario y nuestra tensión se altera ligeramente debido al nerviosismo que nos genera esta situación, por lo que se necesitarán valores fiables que no estén condicionados por ese momento de estrés pasajero.
- Dedícale el tiempo necesario y no vayas con prisa.
- Adopta una posición adecuada: sentado, sin cruzar las piernas y con la espalda apoyada sería la mejor.
- El brazo debe estar apoyado a la altura del corazón y relajado.
- Apunta los valores obtenidos con decimales, no redondees la cifra.
- Repite la medición pasados unos 3 minutos, pero siempre en el mismo brazo.
- Toma tu tensión siempre a la misma hora, así tendrás una comparativa real entre un día y otro.
¿Es malo tomarse la tensión varias veces al día?
En principio tomarse la tensión varias veces en un mismo día no debería ser malo. Como decíamos, puede que incluso sea una recomendación médica para averiguar nuestro estado de salud. Ahora bien, más allá de eso, obsesionarse con la toma de tensión sí puede ser un gran problema. De hecho, generar una obsesión hacia este valor puede hacer que la tensión aumente al entrar en un estado de ansiedad. Lo ideal es tomársela una vez al día por la mañana a menos que el médico nos aconseje otra cosa.
¿En qué brazo se toma la tensión?
Generalmente se recomienda que esta medición se haga siempre en el brazo izquierdo dado que se encuentra más cerca del corazón y la presión puede ser diferente a la del brazo derecho, pero, en realidad, basta con tomar la tensión siempre del mismo brazo, no es imprescindible que sea en uno o en otro.
Acude a un profesional: la ayuda del seguro médico
Contar con un seguro médico es algo imprescindible a la hora de obtener resultados rápidos, lo que es sinónimo de anticipación en cualquier enfermedad y muchas veces, de mayores posibilidades de cura o de conseguir una mejor calidad de vida. Hacer una comparativa de seguros de salud te ayudará a tener el producto que mejor se adapta a ti en todos los aspectos.
Un seguro médico pone a tu disposición una red de especialistas, clínicas y hospitales que puedas usar cuando lo necesites en cualquier lugar que te encuentres. Entre las muchas afecciones que se pueden tratar con un seguro de estas características encontramos por supuesto los valores alterados de la tensión.
Lo primero que debes hacer si crees que tienes problemas relacionados con la presión arterial es visitar a un especialista que determine qué se debe hacer para mejorarlos: un cambio en la alimentación, bajar de peso, tomar una medicación específica, llevar controles regulares, ayuda para dejar de fumar o trazar un plan de ejercicios para mantener una vida activa entre otros, para conseguir regular los niveles de tensión.
Como ves, controlar estos valores para no tener una subida o una bajada de tensión, o en general, la tensión fuera de los límites que debería (con lo que ello supone) requiere de la intervención de varios especialistas diferentes. Por suerte, con un seguro de salud podrás pedir cita con cada uno de ellos sin intermediarios y de forma sencilla y mucho más rápida de lo que imaginas.