¿Cuánto cuesta un entierro sin seguro?

Esta es una pregunta que nadie suele hacerse hasta que se ve en el momento de tener que contestarla. Y, aun así, en esas horas en que para lo último que tienes la cabeza es para pensar, la mayoría de las veces y de las personas nos limitamos a seguir unos pasos por orden, el que nos van diciendo, y no nos paramos a preguntar el precio de las cosas. Después, cuando todo ha pasado, viene el susto, porque si nunca te has preguntado cuánto cuesta un entierro, te diremos que barato, lo que se dice barato, no es. 

Evidentemente, depende de muchos factores, unos que está en tu mano elegir y otros que no, como en qué provincia se muere uno (o dónde vaya a ser enterrado). Casi la mitad de los españoles cuenta con un seguro de decesos (si tienes la suerte de tener abuela, habrás oído alguna vez la frase “viene a cobrar el de los muertos”, haciendo referencia a la mensualidad que antes se pasaba a cobrar puerta por puerta a los asegurados que tenían contratado el servicio), por lo que están tranquilos sabiendo que cuando falten, los gastos generados por su defunción serán cubiertos por la aseguradora.  

Por lo general, el coste de un entierro básico en este país está entre los 3.000 y 4.000 euros. Si queremos añadir algún “extra”, podemos empezar a hablar a partir de unos 7.000 euros y no es difícil llegar a los 10.000 o 12.000 euros. En casos en los que el fallecimiento se pudiera producir fuera de nuestras fronteras y entrase en juego una repatriación, se sumarían varios miles de euros más.  

Así que sólo con esta información, y sin entrar aún en detalles, empezamos a ver la conveniencia de contar con un seguro de decesos que ayude a la familia a no preocuparse por la cuestión económica en el momento en que ya no estemos.  

Si queremos hacer una estimación de cuánto cuesta un entierro, hay que tener en cuenta los elementos indispensables como pueden ser el féretro, el tanatorio, una urna si se opta por la incineración, la tumba, nicho o lugar de reposo elegido, una lápida, y las tasas y gastos administrativos que haya que pagar, si procede. 

Hay quien decide no tener flores ni recordatorios o esquelas en prensa, pero es poca la gente que no coloca al menos un ramo o corona para despedir a su ser querido. 

A partir de aquí, que es lo mínimo, puedes añadir prácticamente cualquier cosa que se te ocurra, previo pago de su importe, claro. 

Los costes de un entierro pueden llegar a superar los 10.000 euros

Empecemos por el féretro. Los más básicos pueden encontrarse a partir de los 700-800 euros, aunque pueden llegar a precios que ni te imaginas, rondando los 10.000 euros dependiendo de qué materiales hayan usado para fabricarlo o su diseño. Y sí, aunque hayas decidido incinerarte, hay que comprar un ataúd.

Las salas de tanatorio (dependiendo de dónde esté ubicado) suelen tener precios desde unos 500 euros. Allí puedes contratar algún refrigerio, música o diferentes servicios que ofrezcan, que variarán dependiendo de la empresa que gestione cada tanatorio.

Hay que contar con el traslado desde el tanatorio al cementerio de elección que puede suponerte otros 500 euros; y no vamos a considerar una repatriación, que supondría más de 5.000 euros de media…

Una lápida también tiene precios muy diferentes, dependiendo, como el resto, de materiales y diseños, pero una media podría rondar los 500-600 euros, mientras que el nicho, normalmente alquilado por un plazo de tiempo que marca el cementerio, suele oscilar entre los 100 y los 500 euros al año.  

Los gastos que puedes evitar, pero generalmente la gente añade a sus entierros son aquellos que se refieren a las flores, recordatorios, esquelas o libro de firmas, que parecen minucias pero que al final, suman otra cantidad nada desdeñable a la cifra que ya tenemos sobre la mesa.  

Y no olvides que hay unos trámites que cumplir cuando llega este momento, como la anotación en el Registro Civil del fallecimiento, certificado de defunción, certificado de últimas voluntades… son cosas que no se piensan habitualmente pero que hay que llevar a cabo, y suponen unas tasas que fácilmente pueden superar los 100 euros. 

Si eliges la incineración (una opción que se está extendiendo cada vez más en nuestro país, ya que permite prescindir de los gastos del cementerio) dependiendo del lugar de nuestra geografía en el que estés, los precios van de los 300 a los 800 euros aproximadamente. Las urnas donde se depositarán las cenizas también tienen diferentes precios acordes a sus diseños y materiales de fabricación. Hay quien decide conservar esta urna en casa o algún otro lugar de su elección, pero si lo prefieres, puedes depositarla en un columbario, que es el lugar del cementerio donde se colocan las urnas con las cenizas. Pero esto no es gratuito, y el precio empieza a partir de los 250 euros.  

Viendo lo que acabamos de leer, un entierro con un seguro de decesos te costará lo que te cueste la prima que pagas por él. Saber que los gastos generados por un fallecimiento van a estar cubiertos, nos permite tener la tranquilidad de pensar que nuestra familia va a poder vivir ese momento sin ocupar sus cabezas con preocupaciones para las que quizá no estarán todo lo lúcidos que quisieran, y eso no tiene precio.

Si, además, llamamos a la puerta de las emociones, de los sentimientos y de la paz mental, te diríamos que te pusieras a comparar seguros de decesos, entre los que encontrarás los que te ofrece El Corte Inglés Seguros. 

Ya no son los gastos que quizá se encuentren difíciles de afrontar, sobre todo cuando las muertes son inesperadas, imprevistas, y puede que nos pillen sin preparación económica para enfrentar esos importes, sino el agotamiento mental que supone llevar a cabo todos esos trámites, pensar qué hay que hacer y cuándo, qué orden llevan las gestiones…

Un seguro de decesos supone una ayuda inestimable en momentos muy duros para las familias

Saber que alguien va a encargarse de hacer todo eso por tu familia, ayudándoles desde la calma que proporciona poder gestionarlo, les libera de tener que dedicar su tiempo a cosas que añaden estrés a su ya cansado cerebro.  

Entre las coberturas que puedes encontrar están la prestación del servicio funerario, el traslado y la libre elección de cementerio en nuestro país, asistencia familiar, repatriación si es necesaria de extranjeros residentes en España, asesoría jurídica telefónica por si tienes dudas acerca de alguna gestión, gestión final de la vida digital, cobertura utilísima en la sociedad en que vivimos, la posibilidad de hacer testamento online, asistencia en viaje y asistencia psicológica en el acompañamiento del duelo y en procesos de cuidados paliativos. 

La atención personalizada y los más de cuarenta años de experiencia avalan a tu compañía de seguros que se encargará de todo, gastos económicos y emocionales, para que puedas atender en calma lo que es verdaderamente importante.  Quédate con la tranquilidad de saber que puedes levantar el teléfono y dejar que los profesionales lo hagan todo en uno de los momentos más duros de la vida de cualquier persona.