¿Cuáles son los impuestos al cobrar un seguro de vida?

Pólizas

En este artículo podrás informarte acerca de

El principal motivo por el que se contrata un seguro de vida es poder proteger a nuestros seres queridos, pero ¿sabes todo lo que hay que saber sobre este tipo de pólizas? Una de las dudas más comunes respecto a los seguros de vida suele ser qué cuantía recibirán nuestros beneficiarios en caso de nuestro fallecimiento y otra duda es si, al percibir la indemnización, es necesario pagar impuestos. Veámoslo.

¿Hay que pagar impuestos al cobrar un seguro de vida?

En España estás obligado a pagar impuestos al cobrar tu seguro de vida, aunque el tipo de impuesto a pagar en estas prestaciones dependerá siempre de quién sea el beneficiario de la póliza. En las ocasiones en las que el tomador y el beneficiario del seguro son la misma persona se tributará por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, pero, sin embargo, cuando la persona beneficiaria es distinta a la figura del tomador del seguro, se tendrá que tributar por el importe recibido a través del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

Impuestos a pagar al cobrar el seguro de vida

Como hemos comentado, el tipo de impuesto por el que se tributa al cobrar un seguro de vida dependerá directamente de la identidad del beneficiario: en caso de invalidez, el beneficiario del mismo será el asegurado, pero en caso de fallecimiento del asegurado, el beneficiario será la persona designada como tal en la póliza de seguros.

El porcentaje a pagar se tiene que calcular sobre el capital asegurado

Indemnización del seguro de vida en caso de invalidez: en el caso de que el motivo por el que cobras la indemnización del seguro de vida sea por invalidez absoluta tendrás que declarar dicho importe a través de los rendimientos del capital mobiliario, siempre en función de los tramos establecidos por el Ministerio de Hacienda.

Se debe pagar:

  • un 19% hasta los primeros 6.000 euros
  • un 21% a partir de 6.001 hasta 50.000 euros
  • un 23% a partir de 50.001 euros

Indemnización del seguro de vida en caso de fallecimiento: en este caso los beneficiarios tendrán que tributar por el importe recibido a través del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. 

Los parámetros por los que puede variar el importe que se debe pagar sobre este impuesto son los siguientes:

  • Capital asegurado: a mayor capital asegurado, mayor cuantía a cobrar por los beneficiarios, por lo que también, mayor importe a satisfacer. Puede oscilar desde un 7,65% hasta un 34%.
  • Comunidad autónoma en la que reside el fallecido: dependiendo de la legislación de la comunidad autónoma se aplicará un tipo de bonificaciones y reducciones u otro, por lo que la cuantía a abonar tras el cobro del seguro de vida puede variar entre los distintos territorios del país.
  • Grado de parentesco con el asegurado: dependiendo del grado de consanguinidad que se tenga con el fallecido se tendrá derecho a una serie de bonificaciones o reducciones a la hora de la tributación:
  • Se aplicará una reducción máxima a los hijos menores de 21 años.
  • Se puede adquirir una reducción adicional si el beneficiario cuenta con una minusvalía de entre el 33% y el 65%
  • La reducción máxima se eleva cuando la minusvalía del beneficiario supera el 65%

Si quieres obtener más información para calcular tu seguro de vida o cualquier otro tipo de seguro, contacta con nuestros expertos a través del formulario. Pulsa “te llamamos” para que uno de nuestros asesores se ponga en contacto contigo de forma directa y gratuita, y no olvides preguntar por VidaMovida, el primer seguro de vida que te paga por anda. Consigue el mejor precio en tu seguro de vida.

¿Cuánto se puede cobrar por un seguro de vida?

El importe a cobrar por una póliza de seguros de vida va a depender del capital asegurado. A grandes rasgos, una indemnización media por fallecimiento puede rondar los 35.000 euros, pero esta cuantía puede variar mucho en función del territorio en el que nos encontremos. También deberás tener en cuenta que del importe a cobrar hay que descontar la cantidad a pagar en concepto de impuestos.

La cuantía a pagar dependerá de las características de los beneficiarios

El importe a cobrar dependerá asimismo de las garantías complementarias contratadas:

  • Doble capital: en el ámbito de los seguros nos referimos a doble capital cuando a la cobertura por fallecimiento o por invalidez se le suma la garantía adicional de fallecimiento o invalidez por causa accidental (con capitales asegurados de idéntico importe). Cuando la causa del siniestro es un accidente el beneficiario de la póliza de seguros de vida percibe el capital asegurado dos veces, una por el capital asegurado por muerte o invalidez y otra por el capital asegurado por muerte o invalidez por accidente.
  • Triple capital: en este caso se utilizaría la misma fórmula que en el concepto anterior. La garantía adicional se contrataría en concepto de fallecimiento o invalidez por accidente de circulación. En caso de producirse un siniestro por accidente de circulación, el beneficiario percibiría el capital asegurado 3 veces, una por el capital asegurado por muerte o invalidez, otra por el capital asegurado por muerte o invalidez por accidente y otra por el capital asegurado por muerte o invalidez por accidente de circulación.

Cada vez es más habitual la contratación de este tipo de garantías adicionales, aunque esto pueda suponer cierto incremento en la prima del seguro. Es importante tener en cuenta que contratar este tipo de garantías no implica que no se vaya a recibir la indemnización si sufres invalidez o fallecimiento a causa de un accidente. Al contratar un seguro de vida estarás asegurado frente a cualquier tipo de invalidez o muerte (dependiendo siempre de las condiciones contratadas en tu póliza de seguros). 

Asegura el futuro de los tuyos y vive tranquilo con un seguro de vida que les garantice un capital para solventar cualquier problema que se pueda presentar en el momento en que tú ya no estés.

Importancia de la edad del beneficiario del seguro de vida

Si este es un hijo del fallecido, menor de 21 años, cuenta con una reducción máxima para una base imponible determinada y una reducción adicional en esa base imponible del 100% de las cantidades recibidas, también con un límite.  

Si el beneficiario del seguro de vida es el cónyuge, un hijo mayor de 21 o un ascendiente, tendrá estas mismas reducciones, pero lo que varía son las cantidades de la base imponible. Del mismo modo, esto ocurre también cuando el beneficiario cuenta con alguna minusvalía, ya que, dependiendo del grado de esta, cambiarán las reducciones: si está entre el 33 y el 65%, o por encima de este último.

Siempre conviene informarse bien, porque aparte de las distinciones entre unas CCAA y otras, en algunas de ellas también se pueden aplicar reducciones hasta de 100.000 euros de la base imponible y cuentan con una bonificación que puede alcanzar el 75% si los beneficiarios fueran cónyuge, hijos, padres o personas que presenten algún tipo de discapacidad.  

El día del fallecimiento del asegurado es cuando se devenga este impuesto y debemos recordar que esta forma de tributación será de aplicación cuando el total del capital se reciba en un único pago.

¿Los autónomos tienen alguna ventaja?

Has de saber que los trabajadores en esta situación pueden desgravarse las primas de su seguro de vida. Así, ofrece beneficios fiscales también para el tomador, en este caso, que podrá deducirse un máximo de 500 euros de las cuotas pagadas en su seguro de vida por determinadas coberturas.

No pierdas el tiempo y ponte a comparar entre seguros de vida y elige el mejor para ti y los tuyos, porque es la mejor manera de vivir tranquilo y poder mirar a los que más quieres pensando que estarán cubiertos ante cualquier eventualidad. Piensa que cuando hablamos de herencias, se pueden heredar deudas también, en caso de que las hubiera. En cambio, las cuantías que provengan del cobro de un seguro de vida son inembargables, aunque el tomador fallecido pudiera tener herederos legales o acreedores que reclamen cobrar lo que se les adeuda. Así, el tomador puede tener la tranquilidad de que sus beneficiarios contarán con las cantidades que recibirán del seguro de vida sin problemas.