Coche siniestrado: ¿qué pasa con el seguro?

En este artículo podrás informarte acerca de
El concepto “siniestro” posiblemente sea uno de los más utilizados, si no el que más, dentro del mundo de los seguros, ya que tiene protagonismo en cualquier tipología de pólizas, ya sea de hogar, moto, salud, vida, automóviles…
En este artículo, prestaremos especial atención a algunas cuestiones relacionadas con los seguros de coche y los siniestros.
¿Cómo actúan los seguros de coche cuando un vehículo notifica un siniestro?
Antes de dar respuesta a esta pregunta, debemos definir brevemente qué es un siniestro, aunque ya os adelantamos que es un término un tanto relativo, ya que varía dependiendo de la compañía de seguros de la que hablemos así como del tipo de póliza que cada tomador decida contratar.
Dicho esto, en líneas generales, hablamos de siniestro en un seguro de coche cuando el tomador sufre un accidente, robo u otro tipo de daños que suponen unas consecuencias económicas determinadas, pudiendo hasta incluso considerarse como siniestro total cuando el coste del arreglo del vehículo es superior al valor máximo (100%) que se haya fijado en la póliza contratada. Mucho ojo en este punto porque hay algunas compañías que pueden considerar siniestro total un vehículo cuando la reparación oscila entre el 75% y el 90% del valor total del seguro fijado previamente en la póliza. Además, a la hora de las indemnizaciones también se tienen en cuenta factores como la edad del coche accidentado o si el valor de la indemnización está fijado como nuevo, venal o de mercado.
Existen diferentes niveles de siniestro y para poder determinarlo, en España las compañías aseguradoras se basan en dos famosos convenios instaurados en la década de los 90 como son:
- CIDE: Convenio de Indemnización Directa Español
- ASCIDE: Acuerdo Suplementario al Convenio de Indemnización Directa Español.
Ambos convenios se tramitan de forma ágil a través del Centro Informático de Compensación de Siniestros, (CICOS).
¿Qué ocurre cuando se notifica un siniestro a la compañía de seguros?
Habitualmente, las pólizas de cada seguro indican los pasos a seguir para notificar un siniestro concreto a la compañía, por tanto, es conveniente tener en cuenta que la parte contratante siempre dispondrá de toda esa información por si en un momento dado, ha de utilizarse para comenzar con un proceso de reclamación.
Una vez el tomador del seguro ha notificado un siniestro a su compañía aseguradora de confianza, esta comienza con todo un proceso que, a grandes rasgos, se divide en las siguientes fases:
- Apertura de expediente en la que se incluye toda la información del caso.
- Realización de todas las comprobaciones oportunas que faciliten la extracción de conclusiones con el objetivo de dejar constancia de la veracidad del suceso.
- Tras aunar todos los datos anteriores se procede a la valoración del caso en cuestión. Es aquí donde, habitualmente, entra la figura del perito de seguros, en este caso de vehículos, pero los hay especializados en todas las tipologías de seguros que existen en el mercado.
- Resolución y notificación al tomador de la cuantía total a indemnizar.
En definitiva, asegurar un coche se trata, básicamente, de fijar una cantidad de dinero determinada que será el tope con el que la aseguradora podrá indemnizar al tomador si sucede una situación de accidente, robo u otro daño.
En este sentido, cada aseguradora tiene unos requisitos diferentes. Hay quien dependiendo del nivel del siniestro indemniza con un porcentaje determinado al tomador del seguro y, puede que otra compañía otorgue otro importe aun siendo el mismo siniestro.
Cada una tiene sus especificaciones propias y por ello es conveniente negociarlo bien e informarse de todos los detalles a la hora de contratar un seguro de coche, ya que llegado el momento (esperemos que no), dicha información puede resultar muy útil.