¿Puedo hacerme análisis de sangre y orina a través del seguro de salud?
En este artículo podrás informarte acerca de
Los análisis de sangre y orina son pruebas médicas habituales que se utilizan para evaluar nuestra salud general y diagnosticar ciertas dolencias o afecciones médicas.
Son herramientas importantes, pero hay que recordar que deben ser interpretados por un médico y que no debemos sacar conclusiones basadas únicamente en su lectura sin la supervisión y orientación adecuadas de un profesional sanitario.
Análisis de sangre y orina en tu seguro médico: las pruebas diagnósticas
La mayoría de los seguros médicos incluyen los análisis de sangre y orina dentro de los servicios de medicina preventiva o de diagnóstico. Dependiendo de la póliza que tengas, los parámetros cubiertos en tu seguro de salud pueden variar, ya que algunas pruebas muy específicas podrían no estar incluidas. Probablemente, podrás acceder a este tipo de analíticas con un pequeño pago adicional y, si necesitas más pruebas que se basen en los resultados de esos análisis, puede que debas solicitar una autorización a tu aseguradora para dar el siguiente paso. Es un procedimiento muy sencillo que en algunos casos puedes hacer directamente online o llamando por teléfono.
La analítica de sangre se realiza para conocer la cantidad y la calidad de nuestras células sanguíneas, así como la presencia de sustancias químicas en la sangre. Se miden los niveles de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas, así como los de diferentes tipos de proteínas, enzimas y hormonas. También puede incluir pruebas de función hepática, renal y tiroidea, y ayuda a la detección de enfermedades infecciosas y otros trastornos médicos.
Los análisis de orina se hacen para controlar la composición y concentración de sustancias químicas presentes en la orina, como proteínas, glucosa, sales y otros compuestos. También se buscan células sanguíneas y bacterias para detectar posibles infecciones del tracto urinario.
¿Qué enfermedades se pueden detectar con un análisis de orina?
Gracias a los análisis de orina se pueden detectar muchas enfermedades y poner sobre la pista a los médicos, ayudándoles a saber hacia dónde se debe orientar la búsqueda de nuestro malestar.
Principalmente, pueden detectar infecciones del tracto urinario, al mostrar la presencia de bacterias, glóbulos blancos y nitratos en la orina, indicadores habituales de una infección de orina. La presencia de glucosa en nuestra orina puede ser un indicador de diabetes, las proteínas pueden revelar una enfermedad renal y la bilirrubina o el urobilinógeno son signos de enfermedades hepáticas. Por otro lado, si aparecen cristales de calcio o ácido úrico en la orina, podemos tener cálculos renales. Y si aparece calcitonina, que es una hormona tiroidea, se puede sospechar algún trastorno de tiroides.
Es importante tener en cuenta que, aunque los análisis de orina son muy valiosos para detectar estas u otras patologías, no son una herramienta de diagnóstico definitiva.
Si sospechas que puede pasarte algo o notas síntomas que no relacionas con nada en particular, habla con tu médico para valorar la posibilidad de hacerte un análisis que te haga salir de dudas y quedarte tranquilo.
¿Y de sangre?
La analítica de sangre es una prueba muy conocida prácticamente por todos. Es realmente útil para poder saber, de acuerdo con los valores que obtengamos en los resultados, cómo anda nuestro organismo.
Con un análisis de sangre podemos saber si tenemos bajos los niveles de glóbulos rojos, hemoglobina o hematocrito, síntomas clásicos de una anemia, si padecemos diabetes (si el nivel de glucosa en sangre es más alto de lo normal), si las enzimas hepáticas tienen niveles elevados, si podemos tener una enfermedad renal en el caso de que la creatinina o la urea en sangre supere el nivel recomendado, o cuáles son los niveles de colesterol y triglicéridos, factores ambos de riesgo que se relacionan con las enfermedades cardiacas. Además, se puede conocer la presencia de anticuerpos contra algunas enfermedades infecciosas como la hepatitis, la sífilis o el VIH.
Los análisis de sangre y orina son pruebas que ayudan a la detección de patologías y a su seguimiento, y deben ser interpretadas por un médico
No debemos alarmarnos de manera innecesaria, ya que todos los parámetros que se miden en los análisis de sangre y orina para conocer nuestro estado de salud tienen unos rangos dentro de los cuales deben estar nuestros resultados. Además, si acabamos de pasar o estamos cursando alguna enfermedad, puede ocurrir que estos valores se alteren sin que sea significativo. Por eso, la adecuada interpretación por un médico es fundamental, ya que nos indicará si todo está bien y qué debemos hacer en caso contrario.
¿Qué otras pruebas de diagnóstico están incluidas en el seguro de salud?
Las pruebas de diagnóstico cubiertas por un seguro de salud pueden variar según tu póliza y aseguradora. Por eso es recomendable hacer una comparativa de seguros médicos para informarte de qué coberturas puedes tener a tu disposición, aunque lo más habitual es que incluyan, entre otras:
- Radiografías, con las que se obtienen imágenes de la zona deseada de nuestro cuerpo y se pueden diagnosticar fracturas u otras afecciones.
- Tomografías computarizadas (TC o TAC), que utilizan rayos X para arrojar imágenes detalladas con las que se pueden diagnosticar problemas en huesos, órganos, o el área del cuerpo que necesiten examinar.
- Resonancias magnéticas, que usan un campo magnético y ondas de radio para producir también imágenes detalladas y ayudan en el diagnóstico de posibles problemas en el cerebro, la columna vertebral y otras zonas de nuestra anatomía.
- Ecografías, obtenidas gracias a ondas sonoras de alta frecuencia que facilitan imágenes de zonas blandas que no podrían verse en una radiografía, por ejemplo.
- Colonoscopias, mediante las que se examina el colon con una cámara y son de gran ayuda para diagnosticar enfermedades asociadas a la zona colorrectal.
- Mamografías, necesarias para poder hacer una detección temprana del cáncer de mama u otras patologías de la zona mamaria.
Aunque estos son ejemplos de pruebas diagnósticas generalmente cubiertas por los seguros de salud, dependiendo del que tengas puede ser necesaria una autorización previa, como anotábamos antes. En este caso, será tu especialista quien te lo indique al solicitar la prueba que necesite para completar la evaluación de tu caso, y te dirá también de qué forma obtener la mencionada autorización. Lo cierto es que tanto los análisis de sangre y orina, primer paso para localizar una posible patología, como el resto de pruebas que ofrecen los seguros médicos son de una gran importancia a la hora de garantizar nuestra tranquilidad.