Cambios diarios para tener una familia saludable

Vida Saludable

En este artículo podrás informarte acerca de

Calcula tu seguro de salud

Si hay algo que preocupa más que nunca a la sociedad en general y más de forma concreta a los españoles es el estilo de vida y los malos hábitos. 

Somos muchas las generaciones que han crecido merendando alimentos procesados y horneados en grandes industrias, muchos los que no han tenido como hábito la práctica de algún deporte o incluso los que fumaban demasiado o jamás han probado el pescado. 

Seamos realistas, todos y cada uno de nosotros tenemos algo que nos gustaría cambiar de nosotros mismos o de nuestro estilo de vida. ¿Por qué no lo hacemos? Nunca es tarde para empezar. Comienza por consultar si tu seguro de salud incluye medicina preventiva para ver cómo andas, antes de empezar. Y a todo esto, ¿sabías que El Corte Inglés Seguros te ofrece un seguro llamado vidaMovida? ¡Un seguro de vida que te paga por andar!  

Para comenzar con el cambio debemos enfrentarnos a él y hacer autoevaluación de nuestro día a día y forma de vida. ¿Con qué aspectos no te sientes satisfecho? ¿Qué te gustaría cambiar? ¿Cómo crees que podrías hacerlo? 

Solo con el hecho de responder a esas tres preguntas tu vida podría estar cambiando, ese ya es un primer paso.

En términos de familia, debemos extrapolar la autocrítica y además, puede convertirse en todo un planazo familiar

¿Cómo cambiar los malos hábitos en familia y pasar a llevar un estilo de vida más saludable?

En primer lugar, tenéis que reuniros todos los componentes de la familia y, de forma personal, responder a preguntas como las que hemos formulado anteriormente. Una vez se haya realizado el análisis, llegaría el momento de la puesta en común de todas las conclusiones extraídas en ese proceso. 

Se trata de que en esa reunión cada uno de los participantes aporte aquello que le gustaría cambiar y proponga una solución. No vale con “quejarse” o “lamentarse” y no proponer una solución; la solución es la clave.

Por ejemplo, Fabiola de 8 años cree que estaría muy bien que toda la familia saliera en bici los sábados por la mañana en lugar de salir a desayunar fuera o ir a ver el partido de fútbol de su hermano Luis. ¡Así todos participan!  

Al final, se trata de integrar e interiorizar pequeños cambios en la rutina diaria como:

  • Evitar los ascensores y escaleras mecánicas: ¿eres consciente de la inmensa cantidad de beneficios que tiene subir escaleras? A veces subimos en el ascensor de forma automática y, la realidad es que subir por la escalera es más rápido y, por supuesto, más saludable. Cambia el chip: en el metro o en un centro comercial, no uses las escaleras mecánicas. Es un pequeño cambio que te ayudará a mantener el organismo activo sin apenas darte cuenta.
  • Jugar al juego de probar: se trata de que un día por semana, todos probéis un alimento que nunca habíais probado, o por el que sintáis cierto rechazo. Convirtiendo esto en un juego será más fácil que los niños se animen a aprobar ciertos alimentos por aquello de las famosas “manías”. ¿Qué tal cocinar algo diferente con ellos o jugar con la comida? Por ejemplo, un plato de brócoli puede presentarse como un bosque mágico y no como un aburrido plato de verduras… ¡La comida también entra por los ojos! 
  • Participar en las tareas del hogar: ¿por qué todo han de hacerlo los adultos? Ir integrando poco a poco pequeñas rutinas hará que los niños sean más independientes y conozcan y valoren el esfuerzo que conlleva una convivencia. Por ejemplo, empezar por incluir la tarea de hacer su cama (aunque quede mal, no pasa nada) o doblar sus propios calcetines y poco a poco, ir añadiendo pequeñas tareas cotidianas. 
  • El ranking de las frutas: ¿quién comerá más fruta esta semana? En este juego familiar solo se necesita un rotulador y una cartulina o folio que se pueda pegar en un lugar donde todos lleguen y que se vea muy a menudo (la nevera es un buen lugar). Cada vez que un miembro coma una pieza de fruta tendrá que añadir un tic en su listado y cada semana habrá un ganador que gane la recompensa -unas entradas de cine o una semana exento de hacer una determinada tarea-. ¡No hay nada como una buena recompensa! Con el tiempo, comer fruta se habrá convertido en un hábito y todos lo tendréis sumamente interiorizado en vuestra vida diaria.
  • Salir a caminar: aunque sea 20 minutos al día, haga frío o haga calor. ¡Caminar es vida! Se trata de ponerse la obligación de esa salida, si no se puede todos los días, cada dos días. Da igual si falta un miembro de la familia, se trata de que cada día se camine un poco. 
  • Gran congreso familiar: es muy saludable para fortalecer los lazos entre toda la familia fijar un rato cada semana (sin distracciones) para realizar una reunión de índole amena y divertida para contaros vuestras preocupaciones o simplemente, para escucharos unos a otros. Esto no tiene por qué ser una cita fija, puede realizarse, por ejemplo, durante un viaje en coche. A veces se nos olvida hablar entre nosotros…
  • Incluye los juegos de mesa: los juegos de mesa favorecen la integración de todos los miembros y son fabulosos para crear buenos recuerdos de familia unida. Un detalle es no guardarlos en un lugar cerrado, sino dejarlos a la vista para tenerlos en cuenta más a menudo. Se trata de evitar la tecnología durante unas horas al mes sustituyéndola por los juegos de mesa.
  • Club de lectura: ¿qué tal si cada miembro de la familia tiene la obligación de leer un libro cada mes? En una de las reuniones familiares, estaría genial compartir qué os ha parecido e intercambiar opiniones. Es una forma muy sencilla y divertida de aprender y hará que, una vez adquirido el hábito, no podáis vivir sin la lectura.

Te estás dando cuenta de que, al final, se trata de crear hábitos y esto solo puede hacerse repitiendo una acción durante un largo periodo de tiempo. 

Por último, no podemos dejar de hablar de lo que ya todos sabemos. Nos referimos a la vital importancia de integrar en la dieta más verduras y pescados, sobre todo cuando hay niños en casa. 

Fortaleciendo los lazos familiares, integrando una dieta saludable, apostando por la cultura y practicando un poco de deporte. ¡Seréis invencibles y el extra de salud para tu familia será coser y cantar!