Neuropediatra en el seguro médico

Vida Saludable

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Los neuropediatras son médicos especializados que se dedican a evaluar, diagnosticar y tratar una amplia variedad de condiciones neurológicas que afectan el sistema nervioso central, el sistema nervioso periférico y los músculos de los niños. Algunos ejemplos de trastornos neurológicos comunes en niños son la epilepsia, los trastornos del desarrollo neurológico, los trastornos del movimiento, los trastornos del aprendizaje, el autismo, y con menor frecuencia, la parálisis cerebral o las enfermedades neuromusculares.

¿Qué es la neuropediatría?

La neuropediatría es una rama de la medicina que se especializa en el estudio y tratamiento de los trastornos neurológicos en niños y adolescentes. Combina los campos de la neurología y la pediatría para proporcionar atención médica integral a pacientes pediátricos que presentan problemas neurológicos.

El trabajo del neuropediatra implica realizar evaluaciones clínicas detalladas, llevar a cabo pruebas diagnósticas como electroencefalogramas o resonancias magnéticas y diseñar planes de tratamiento específicos para cada paciente. Estos planes de tratamiento pueden incluir medicación, terapias físicas, ocupacionales y del habla, o intervenciones quirúrgicas si llegaran a ser necesarias.

Esta especialidad requiere una comprensión profunda del desarrollo normal del sistema nervioso en los niños y de cómo se presentan y evolucionan los trastornos neurológicos en esta población. El objetivo principal de la neuropediatría es mejorar la calidad de vida de los niños con trastornos neurológicos, minimizando las limitaciones funcionales y maximizando su potencial de desarrollo.

¿Qué pruebas hace un neuropediatra?

Un neuropediatra puede solicitar un amplio abanico de pruebas y evaluaciones clínicas para diagnosticar y evaluar un trastorno neurológico infantil, muchas de las cuales suelen estar incluidas en las coberturas de un seguro médico

Tras realizar o solicitar una historia clínica detallada, en la que se recopila información sobre los síntomas que presenta en la actualidad y los antecedentes médicos del niño, así como información sobre el desarrollo, el rendimiento escolar y cualquier otra preocupación relevante, se hará un examen físico completo para evaluar la función neurológica del niño. Esto puede incluir pruebas de reflejos, coordinación, fuerza muscular, equilibrio, tono muscular y función sensorial.

También pueden pedir electroencefalogramas para medir la actividad eléctrica del cerebro y diagnosticar y monitorizar trastornos como la epilepsia o los trastornos del sueño, o resonancias magnéticas, que proporcionan imágenes detalladas del cerebro y la médula espinal y se utilizan para detectar anomalías estructurales, lesiones, tumores u otras alteraciones cerebrales, así como los TAC, que pueden detectar lesiones traumáticas, anomalías estructurales u otras afecciones neurológicas.

Un neuropediatra pedirá las pruebas médicas que necesite para evaluar correctamente al niño, ofrecer un diagnóstico correcto y pautar un tratamiento adecuado

Estas son solo algunas de las pruebas que un neuropediatra puede solicitar que se le hagan al niño, aunque el tipo de pruebas dependerá de cada caso específico y de sus síntomas individuales. Los resultados obtenidos serán evaluados cuidadosamente para determinar el diagnóstico adecuado y diseñar un plan de tratamiento apropiado.

¿Está incluida la especialidad en el seguro médico?

La cobertura de la especialidad de neuropediatría puede variar dependiendo del tipo de seguro de salud que tengamos.

En un seguro como Adeslas Óptima Plus El Corte Inglés encontrarás un neurólogo pediátrico que cuide de la salud de tus pequeños, si así lo necesitan. Ten en cuenta que las coberturas pueden estar sujetas a limitaciones en cuanto al número de procedimientos cubiertos o tener alguna carencia, por lo que lo idóneo es consultar con uno de nuestros expertos que pueda aconsejarte y guiarte para encontrar la póliza de salud que más se ajuste a lo que buscas en cuanto a coberturas y precio.

Fluoroscopias, ecografías cerebrales, punciones lumbares, mielografías, angiografías o polisomnografías son algunas otras pruebas que puedes encontrar en los seguros de salud que ponen a tu disposición en El Corte Inglés Seguros, así que  si haces una comparativa de seguros médicos, podrás hacerte una primera idea de lo que puedes esperar de las diferentes pólizas y una vez te hayas decidido, hacer las consultas que resuelvan las dudas que te hayan surgido para poder contratar un seguro que te brinde la tranquilidad que necesitas.

¿Cuándo es necesario acudir a un neuropediatra?

Podemos considerar pedir cita con un neuropediatra en los casos en que nuestros hijos presenten algún problema en el desarrollo, como no alcanzar los hitos de la evolución motora, del lenguaje o de las habilidades cognitivas a la edad esperada. Si te parece que presenta retrasos en el habla o en la adquisición del lenguaje, problemas de coordinación o dificultades en el aprendizaje, puede que un neuropediatra te dé las pautas que debes seguir para conseguir una mejoría. 

Por supuesto, si ha sufrido convulsiones o ha sido diagnosticado de epilepsia, tendrás que acudir a la consulta de un neuropediatra para que le haga un seguimiento durante el tiempo que considere oportuno.

Uno de los motivos más frecuentes de consulta son los comportamientos atípicos que pueden ser diagnosticados como TDAH o en algunos casos, como trastornos del espectro autista (TEA). Pon atención si crees que tu hijo tiene una alta impulsividad, problemas para regular sus emociones o dificultades de atención.

Las enfermedades neuromusculares, que se presentan con debilidad muscular, pérdida de tono, o dificultad en la marcha, entre otras, también son tratadas por los neurólogos pediátricos, que te enseñarán a manejar estas situaciones de la mejor manera posible. 

Algo a lo que prestamos relativamente poca atención, como los trastornos del sueño o los dolores de cabeza crónicos o muy frecuentes, también deben pasar por la consulta del neuropediatra, que nos ayudará examinando al niño, haciendo una evaluación de los síntomas y encontrando la mejor solución para acabar con estos problemas en la medida de lo posible.