Cómo adelantar a un ciclista

Es cierto que cada vez prolifera más la presencia de ciclistas en las carreteras, y que el debate está servido, ya que en algunas ocasiones se les puede ver circulando en grupo, en otras por vías no autorizadas y que a pesar de llevar coches detrás, no facilitan el adelantamiento. Recordamos que según marca la DGT, los ciclistas en grupo pueden rodar en paralelo de dos en dos, pero tienen que circular lo más pegados a la derecha posible y si hay mala visibilidad, están obligados a circular en fila india. Por carretera tienen que utilizar el arcén si no existe un carril bici y de no haberlo, pueden utilizar la mínima parte de la derecha de la calzada que necesiten para circular con seguridad, aunque por ciudad deben circular por el centro de su carril.

Por suerte, son una minoría los ciclistas que muestran poca educación vial y, sin embargo, siguen siendo muchos los conductores que, por falta de paciencia o desconocimiento, no efectúan los adelantamientos a los ciclistas conforme a la ley, pero no estaría de más informarse un poco acerca de un seguro para accidente de bicicletas, por lo que pudiera pasar.

La Dirección General de Tráfico indica que para adelantar a un ciclista hay que guardar un metro y medio de separación con la bicicleta y que se puede invadir de manera parcial o total el carril a nuestra izquierda, incluso si es una línea continua la que lo separa (eso sí, asegurándonos de que nadie circula en dirección contraria y que no hay ningún riesgo a la hora de efectuar la maniobra). Ahora, la DGT obliga a aminorar la velocidad del vehículo que circula en 20 km/h sobre el límite fijado para ese tramo de la vía cuando se vaya a adelantar a un ciclista.

Así que, de ahora en adelante, cuando necesitemos rebasar a un ciclista, tendremos que reducir nuestra velocidad primero, novedad que incorpora la nueva normativa y cuyo no cumplimiento llevará aparejado una sanción económica de 200 euros con pérdida de puntos, 6 en este caso, ya que se considera una infracción grave.

Con la nueva norma de la DGT, los conductores deberán aminorar su velocidad hasta circular a 20 km/h por debajo del límite que marca la vía para adelantar a un ciclista

Recuerda que si circulas por un tramo de carretera con una limitación de velocidad de 70 km/h, deberás frenar hasta alcanzar los 50 km/h como máximo antes de iniciar el adelantamiento a un ciclista, manteniendo la distancia de seguridad. Si no viene ningún vehículo por el carril que necesitamos invadir, podremos adelantarle, volviendo inmediatamente a nuestro carril sin que con ello se ponga en peligro la integridad del ciclista que dejamos atrás.

Como hemos desgranado en párrafos anteriores, traspasar la línea continua está permitido si no es posible guardar la distancia mínima de 1,5 metros entre nuestro coche y el ciclista. Por supuesto, no dejaremos de insistir en la importancia de que esto puede hacerse siempre que no exista riesgo para el ciclista ni para los ocupantes del vehículo, por lo que si por el carril izquierdo están circulando vehículos, si hay poca visibilidad por un cambio de rasante, si circulamos por un tramo de curvas cerradas o se dan situaciones similares, lo correcto sería esperar un poco hasta llegar a una zona en la que, aún existiendo línea continua, la visibilidad permita el adelantamiento con seguridad. 

De este modo queda aclarado que no solo se puede, sino que se debe traspasar la línea continua para adelantar a un ciclista y si circulamos por carreteras con más de un carril en cada sentido, debemos ocupar completamente el carril adyacente.

En ciudad, debemos guardar la misma distancia de seguridad para adelantar a quien circula en bicicleta. Recuerda que, en ciudad o poblado, la DGT fija que el ciclista debe circular ocupando el centro del carril, facilitando así que los coches que le adelanten le consideren un vehículo más y deban ocupar completamente el carril de al lado para asegurarse de que se guarda ese metro y medio de separación entre bicicleta y vehículo. 

Usar el sentido común y seguir unas pocas normas de convivencia es fundamental para mantener la seguridad en la carretera. Si un adelantamiento es peligroso para alguna de las partes, ten paciencia. Ya llegará tu momento.

Desgraciadamente, circular conlleva sus riesgos, ya sea en vehículos a motor, sin motor o simplemente siendo peatón. Los accidentes ocurren y debemos estar preparados para ellos, sin que esto no suponga que extrememos las precauciones en todo momento para intentar evitarlos en la medida de lo posible.

Si nos vemos envueltos en un accidente con un ciclista, y él ha sido el causante, en principio sería su seguro de hogar, si no tiene otro relacionado con la bicicleta, quien se hiciera cargo de los daños ocasionados a terceros a través de la cobertura de Responsabilidad Civil. 

Por cierto, ¿es obligatorio el seguro en bicicletas? ¿Y sabías que algunos seguros de coche tienen una cobertura extra que puedes contratar y que te cubre si circulas en bici? Si has hecho de la bici tu medio de transporte habitual, o eres un aficionado que la usa con cierta asiduidad, deberías informarte sobre estas cuestiones y así poder salir a rodar con toda la seguridad del mundo. 

Si, en el hipotético accidente con una bici, el coche es el causante y por tanto el culpable del siniestro, será el seguro de coche del vehículo quien se encargue de asumir los daños sufridos por el ciclista y sus bienes. Si tienes un seguro a todo riesgo, también se hará cargo de los desperfectos que puedas tener en tu coche. 

Tras esta lectura, no cabe otra recomendación que la de circular con toda la precaución del mundo -vayamos en coche o bicicleta- tener educación vial y empatía con unos y con otros y guardar estrictamente todas las medidas de seguridad y normas impuestas para intentar evitar causar un accidente.