Síntomas iniciales de la neumonía
Aunque los síntomas pueden variar en mayor o menor grado dependiendo si hablamos de niños, adultos o ancianos, vamos a centrarnos en un término medio, es decir, en los adultos. Además, cuando se trata de niños o ancianos, el riesgo de empeorar o derivar a otros problemas de salud aumenta exponencialmente. Hay que tener especial cuidado cuando se trata de estas edades más débiles.
Algunas de las causas más comunes de la neumonía son; una gripe fuerte que no se ha terminado de curar persistiendo el virus, haber sufrido bronquitis o la aparición de otras bacterias u hongos.
Durante la edad adulta, la neumonía suele manifestarse a través de unos síntomas más o menos comunes como los siguientes.
- La respiración puede ser demasiado rápida o quizá puede costar respirar. ¡Es el principal síntoma de que algo no va bien! En ocasiones puede incluso doler debido al esfuerzo.
- ¿Se escuchan pitidos o silbidos al respirar profundamente?
- Pérdida temporal de apetito.
- Debilidad, malestar, defensas bajo mínimo y cansancio excesivo o fatiga al caminar distancias cortas.
- Taquicardia, es decir, los latidos del corazón aumentan (frecuencia cardiaca).
- Fiebre persistente que no baja de los 38º
- Tos profunda, pudiendo ser seca.
- Aparición de moco verde o amarillo, síntoma de que hay infección.
- En ocasiones pueden darse náuseas, vómitos o diarrea
Si a todos los síntomas anteriores le sumas que has estado enfermo/a o con gripe no mucho tiempo atrás, no es difícil atar cabos… Por favor, nada más notes más de dos o tres síntomas juntos. ¡Acude al médico! Si no tienes un seguro de salud, aprovecha y calcula aquí lo que pagarías, ¡es muy sencillo!