Accidente sin parte amistoso ni atestado: ¿cómo actuar?

Automóvil

En este artículo podrás informarte acerca de

 

Todos tenemos algún amigo pesimista, aquel para el que las cosas rara vez pintan bien. Nuestro amigo estaría contento leyendo nuestra entrada al blog de hoy. Y es que vamos a hablar de esas ocasiones en las que si algo puede empeorar, lo hará

Porque hoy te vamos a tratar de enseñar qué hacer cuando las cosas van a peor una vez has tenido un accidente de tráfico. Si ya es malo tener un accidente, la cosa se pone peor cuando el otro implicado decide que no va a firmar el parte amistoso de accidente, y aún empeora más cuando el conductor se da a la fuga. Por desgracia, no es algo que ocurra con tan poca frecuencia como para no saber cómo actuar. 

¿Qué hacer si la otra parte no quiere firmar el parte amistoso?

Ante todo, dejemos claro que una vez se ha producido un accidente, lo mejor para las partes es rellenar un parte amistoso y firmarlo, ya que todos los trámites se ven agilizados de forma considerable. Por lo tanto, lo primero es tratar de mantener la calma, y tratar de que se pueda firmar este parte. En este sentido, no hace falta siquiera comparar seguros de coche, ya que cualquier compañía prefiere el parte amistoso de accidente. 

Sin embargo, en ocasiones no es tan fácil, bien porque los conductores no se ponen de acuerdo en cuál de los dos ha sido el causante del accidente, o bien porque directamente uno de los dos decide no firmar el parte. En estos casos, y antes de entrar en discusiones que no van a llevar más que a alterar el momento más de lo que ya lo esté, debemos llamar inmediatamente a la Policía Local, o a la Guardia Civil

Y cuidado con esas ocasiones en las que el conductor con el que hemos tenido el accidente nos dice que es que lleva mucha prisa o que no tiene tiempo para quedarse a rellenar el parte… podemos estar ante alguien que no quiere firmar dicho parte, y más adelante encontrarnos con que ni siquiera ha enviado el parte a su compañía, por lo que el accidente se complica aún más.

En estos casos, la presencia de la Policía es necesaria para que puedan levantar un atestado del accidente, es decir, para que redacten un documento  que será la prueba de más peso a la hora de certificar que el accidente existió, aunque el otro conductor no haya dado aviso a su compañía. 

Además, el atestado que redacta la Policía o la Guardia Civil suele recoger quién ha tenido la responsabilidad del accidente, así como los datos de los vehículos implicados en el mismo, por lo que ante una situación como la que te indicamos, el atestado se convierte en el mejor certificado de que el accidente tuvo lugar y tuvo un causante.

¿Y si la otra parte se da a la fuga?

Vamos a darle una vuelta de tuerca a la situación, y vamos a ponerla peor de lo que ya es por sí misma. El conductor que ha provocado el accidente se ha dado a la fuga, y nos ha dejado tirados con el vehículo, sin tiempo alguno de reaccionar, y con la sensación de que no vamos a tener un solo dato que aportar al seguro de nuestro coche

De nuevo, lo principal que podemos recomendarte es que mantengas la calma. Y esto te lo indicamos porque en pleno momento de tensión hay conductores que, si pueden, cogen el coche y salen en persecución del conductor que ha provocado el accidente. Nunca se debe hacer esto, en primer lugar, porque podrías causar un segundo accidente y, en segundo lugar, porque tu objetivo ahora mismo debe ser hacerte con la mayor información posible sobre el vehículo que ha provocado el accidente. 

Trata de preguntar a los posibles testigos que hayan podido ver el accidente, te sorprenderá ver que hay mucha más gente prestando atención de la que en principio parece, y trata de que te puedan dar todos los datos que hayan podido quedarse, como la matrícula, la marca, el modelo o el color del vehículo fugado. 

Por supuesto, el paso siguiente debe ser llamar a la Policía, ya que podrán levantar un atestado incluso aunque el otro conductor se haya fugado y que luego podrás usar con tu compañía de seguros. Recuerda que no debes tocar o mover nada, ya que una vez redactado el atestado se abrirá una investigación para tratar de aportar cuanta más luz sea posible sobre el accidente. 

En el caso de que hayas sufrido lesiones, no dejes de ir al hospital, para que puedas tener un parte de lesiones de ese mismo día y poder más adelante solicitar las indemnizaciones. Las pruebas médicas que sean necesarias deben hacerse en las 72 horas inmediatamente posteriores al accidente, pero nosotros te recomendamos que las hagas una vez hayas terminado el trámite con las autoridades. 

Y si no hay conductor, ni matrícula, ni dato alguno, ¿cómo conseguiré una indemnización?

A primera vista puede que te parezca que no hay nada que hacer, y que nunca llegarás a cobrar una indemnización por tus daños, porque no hay nada con qué demostrar este accidente. Pero no, recuerda que has mantenido la calma, y que has llamado a la Policía, por lo que incluso en el caso en que sea imposible identificar al causante del accidente, el Consorcio de Compensación de Seguros, entidad pública, se hará cargo del pago de estas indemnizaciones. 

Por eso vuelve a cobrar importancia la presencia de agentes de la autoridad, ya que el atestado será el mejor certificado que podrás presentar para probar la existencia del accidente, junto con el parte de lesiones que te darán en el hospital. 

El Consorcio será quien se encargue de abonar la indemnización por los daños personales que hubieras podido sufrir, así como por daños materiales, si bien debes saber que la Unión Europea permite una franquicia de 500 euros en la indemnización por daños materiales.