¿Cuánto cuesta mantener un coche?
En este artículo podrás informarte acerca de
Qué gran pregunta… y es que si es la primera vez que vas a tener un coche en propiedad lo normal será que estés fijándote solo en el precio del vehículo. Sin embargo, hemos de decirte que tener un coche lleva una serie de gastos aparejados de los que no siempre nos percatamos antes de tenerlos ante nuestros ojos: hay que repostar, repararlo, llevarlo a pasar revisiones, mantenimientos, pagar impuestos y tener un seguro para el coche.
A lo mejor, cuando acabes de leer este post, decides que quizás esperas un poco más, que sigues usando el transporte público, que otros días te coges la bici, alquilas un patinete eléctrico o vas a hacer deporte e ir a trabajar caminando cada día, dado que no se trata de un medio de transporte económico, pero sin embargo sí ofrece una libertad y una serie de ventajas que hacen que merezca la pena.
Además, si no es una opción porque tu lugar de trabajo está demasiado lejos de tu casa para que puedas llegar con relativa facilidad o porque no hay una buena combinación de transporte público y tienes que perder horas cada día entre la ida y la vuelta, no te preocupes, sigue leyendo y te contamos lo que te puedes gastar en mantener un coche.
Cuánto cuesta mantener un coche al año
Una vez hemos adquirido un vehículo acorde a nuestros gustos y necesidades es el momento de tener en cuenta a qué gastos vamos a tener que hacer frente para mantenerlo a lo largo de todo un año.
Todos los vehículos comparten una serie de gastos, aunque la cantidad invertida en ellos dependerá de muchos factores
Hoy en día existe la opción de tener un vehículo en leasing, renting o, también, en alquiler por meses o semanas. No obstante, en este post nos centraremos en un vehículo en propiedad para poder hablar de todos y cada uno de estos gastos asociados del vehículo.
Kilómetros recorridos
Los kilómetros que cada conductor recorre cada año son también importantes, ya que influirán directamente en la duración del coche y el gasto que realicemos en él año tras año. Al usar más el vehículo, tendremos que repostar con mayor frecuencia, pasar ciertas revisiones en un espacio de tiempo más reducido dado que se recorren los mismos kilómetros, pero en menos tiempo, y el mantenimiento y cambio de piezas será más frecuente.
Combustible
Llenar el depósito es un gasto inevitable a no ser que tengas el coche aparcado en tu garaje y nunca lo uses.
El precio del combustible es libre, así que imaginarás que varía bastante. Este gasto también se ve alterado en función de las características del vehículo en sí, como la potencia o la cilindrada, y del combustible que empleen para su funcionamiento -gasolina, diesel, híbrido, híbrido enchufable, glp o completamente eléctricos-.
Dependiendo de lo que ruedes, llenarás el tanque de tu coche una o varias veces cada mes.
Seguro del coche
Tendrás que contratar un seguro, y para esto lo mejor es comparar entre los seguros de coche. Teniendo en cuenta los datos que se publican en el sector de los seguros, y haciendo una estimación aproximada, podríamos colocar el gasto medio de un seguro básico a terceros en unos 350 euros al año, el de un terceros ampliado rondaría los 400, y si quisiéramos un seguro a todo riesgo sin ningún tipo de franquicia, podríamos pagar más de 1.000 euros. Conviene recordar que seguramente puedas encontrar primas por debajo y por encima de las cifras orientativas que ofrecemos, ya que entran en juego muchas variables cuando se contrata un seguro para el coche. Desde el modelo a la antigüedad, la experiencia del conductor, el código postal de domicilio, el uso del vehículo -profesional o particular-, etc.
Aunque también jugarán un papel importante las ofertas o promociones que la compañía tenga en vigor en el momento de la contratación… lo mejor es hablar con un asesor de El Corte Inglés Seguros que te orientará en todo momento para poder encontrar la póliza que mejor se adapte a lo que estés buscando y que cuente con las coberturas que se ajusten a tus necesidades.
Mantenimiento
Cada cierto tiempo se debe hacer el mantenimiento del vehículo, y es que en las revisiones puede darse el caso (que en algún momento llega) de tener que cambiar algún elemento de tu coche, como las bombillas si se te han fundido, los filtros y el aceite -que tienen un tiempo de vida útil-, los neumáticos, líquido y/o discos de frenos, de vez en cuando hay que recargar el aire acondicionado, etc. Cuando esto sucede, hay que abonar estos repuestos o piezas aparte del coste del mantenimiento. La buena noticia es que hay pólizas de seguro que incluyen revisiones gratuitas en establecimientos adheridos o concertados y permiten ahorrar en el mantenimiento del coche.
Impuestos asociados a un coche
Como es comprensible, dependen del coche que tengas, de su potencia fiscal (que no son los mismos caballos que todos buscan en las publicaciones de motor) y también depende de dónde estés empadronado o, mejor dicho, del domicilio donde figure la residencia del coche. Hay diferencias notables entre unas comunidades y otras, e incluso dentro de diferentes municipios de una misma comunidad autónoma.
Aún sin ser un impuesto, la ITV es una revisión que también conlleva un coste. Responde al nombre de Inspección Técnica de Vehículos, y debe realizarse cuando se estipule por antigüedad del vehículo o su uso.
¿A partir de cuántos años no paga impuestos un coche?
Los coches denominados como “clásicos” están exentos de pagar los impuestos de circulación. A pesar de que un coche de 25 años suele entrar dentro de esta categoría, en cada Comunidad Autónoma deberá cumplir con una serie de requisitos para ser considerado de esta manera y por lo tanto no tener que pagar este impuesto.
Otros gastos
Los gastos en aparcamiento regulado si vives en una ciudad donde este sistema esté implantado, parkings, peajes cada vez que viajamos –si queremos rodar por una autopista de peaje, ya que siempre podremos encontrar una ruta alternativa–, y lavados están estimados, según empresas dedicadas a hacer este tipo de estudios, en cifras que rondan los 500 euros anuales.
Si nos ponemos a hacer cuentas, la comodidad de tener un coche nos supone un dinero cada año, y aunque somos más o menos conscientes de ello, lo raro sería que alguien (a no ser por caso de extrema necesidad) se desprendiera de su coche que, al final, nos da la ansiada libertad.